Los maestros bonaerenses realizaron ayer la segunda jornada del paro por 48 horas en el marco del prolongado conflicto salarial que mantienen con la administración de Daniel Scioli. Voceros de prensa del director general de Educación provincial, Mario Oporto, ratificaron a PáginaI12 que la prolongación del ciclo lectivo hasta el 19 de diciembre y la sanción salarial al bolsillo docente son “decisiones irreversibles e indeclinables que no dependen de ningún eventual acuerdo con los gremios docentes”.

La medida de fuerza tuvo –según aseguró a este diario el secretario general de Suteba, Roberto Baradel– una adhesión “cercana al 97 por ciento tanto en el conurbano como en el interior de la provincia”. Además, el sindicalista destacó que “contamos con gran apoyo de la comunidad, especialmente de los padres que se acercaron a los maestros para expresarles su apoyo y solidaridad compartiendo charlas, mateadas y volanteadas”. Desde la otra vereda, fuentes de la Dirección General de Educación provincial dijeron que la adhesión fue “del 60 por ciento en los establecimientos públicos y nula en los privados”.

Oporto advirtió que el gobierno provincial se mantendrá intransigente frente a lo que definió como “un exceso absoluto de los gremios, que están alargando el conflicto abusivamente, privando a millones de alumnos de sus clases y generando preocupación en los padres”. A la vez, el funcionario remarcó que el Ejecutivo bonaerense “llegó al límite” y “no va a poner un peso más en la oferta de aumento”. Al respecto, precisó que entre el aumento de principios de año y el ofrecimiento actual, los maestros provinciales “tendrán el privilegio inusitado, en comparación con otros docentes del país, de aumentar en un 39,5 por ciento su sueldo inicial que pasa a 1450 pesos”. Desde la perspectiva oficial, la única manera de destrabar el conflicto radica en que el Frente Gremial Docente “dé marcha atrás y acepte la propuesta que se elevó en la última reunión paritaria”.

Baradel, por su lado, criticó a la gobernación porque “desconoció groseramente lo que se consensuó en la comisión salarial propuesta por el propio gobierno como un espacio de negociación e integrada, entre otros, por técnicos del mismo gobierno”. El dirigente gremial argumentó que “en el último día de funcionamiento de la comisión, me reuní con el jefe de Gabinete (Alberto Pérez) y él me expresó la voluntad de avalar lo trabajado en la comisión”. Voceros de Oporto sostienen que en la comisión “se trabajó sobre un borrador que podía plantear sugerencias a la oferta salarial oficial, pero que nunca fue elevado al status de propuesta, ya que no contó con el aval de ningún acta oficial”.

El próximo lunes el Frente Gremial se reunirá y evaluará los pasos a seguir. Según palabras del propio Baradel, “esperamos una nueva llamada al diálogo para resolver de una vez por todas este conflicto con una propuesta que no afecte la conformación y la escala salarial. En caso de que esto no ocurra, no descartamos nuevas medidas de protesta”.