Luego de haber coqueteado con presentarse en la ciudad, Mauricio Macri volvió a confirmar su precandidatura presidencial en un viaje de campaña por Córdoba. El jefe de Gobierno también tuvo tiempo para el placer: “En Villa Carlos Paz, almorzando con (el campeón olímpico Fabricio) Oberto y escuchando las anécdotas de su paso por la NBA”, twitteó muy orondo al mediodía de un día laborable. “Antes, me invitó a recorrer su museo en la Villa. Imperdible, se los recomiendo!!”, propuso, cual guía turístico.

El viaje de Macri en medio de las tomas de tierras y la discusión presupuestaria despertó nuevas críticas de la oposición porteña. “Disculpe, usted no intentaba gobernar una ciudad. Digo, nomás... no sé”, le contestó por la red social el legislador socialista Julián D’Angelo a los mensajes veraneantes de Macri. Lo mismo le pasó a Horacio Rodríguez Larreta cuando le exigió a la ministra de Seguridad, Nilda Garré, que desaloje el Club Albariño en nombre de “los vecinos y yo”. “Perdón, ¿la ciudad de Buenos Aires la gobierna Garré? Estoy algo confundida...”, le respondió la legisladora de la Coalición Cívica, Diana Maffía.

Con su viaje a Córdoba, Macri reactivó su campaña presidencial, luego de descartar públicamente su idea de adelantar las elecciones a marzo y de presentarse en las dos elecciones. “En cada lugar del interior adonde voy, la gente me pide que no afloje en la lucha contra esa gente que pretende vivir al margen de la ley aprovechándose de los que menos tienen”, se despachó. ¿Ocuparse del tema? Quedará para después de las fiestas.