En los festejos por la Navidad el número de asistidos en hospitales de todo el país por uso de pirotecnia, mal descorche de botellas y peleas callejeras disminuyó respecto del año pasado. Aunque más de 100 personas resultaron heridas durante las celebraciones navideñas –73 casos registrados sólo en la ciudad de Buenos Aires–, la mayoría de las lesiones no fueron de gravedad. Sin embargo, la cantidad de niños con heridas producto del descuido de los adultos es más alta que años anteriores. Según la doctora Costas, jefa de guardia del hospital de oftalmología Lagleyze, “es fundamental para reducir los daños la educación y la propaganda que induzca al uso de pirotecnia segura y que, sobre todo, persuada a los padres para que los niños no utilicen los ‘cohetes’ como un juguete más”. Asimismo, durante los festejos se registraron al menos 10 accidentes automovilísticos en distintas rutas del país.

En la ciudad de Buenos Aires, el número de personas asistidas es similar al registrado en 2007 y las afecciones, en general, fueron más leves. No obstante, la novedad para esta Navidad fue que en la mayoría de los casos estaban involucrados menores de edad. Las atenciones médicas se realizaron en los hospitales oftalmológicos Santa Lucía y Pedro Lagleyze, y en el Instituto del Quemado. Un total de 24 pacientes fue atendido en el Instituto del Quemado de esta ciudad, de los cuales dos fueron de mayor gravedad. La jefa de guardia del hospital, Miriam Miño, informó que los casos más urgentes fueron el de un nene de un año que sufrió quemaduras y un hombre de 30 al que se le debió reconstruir la oreja, que le fue “mordida por otro ser humano durante una riña”. Miño sostuvo que “lo que más llamó la atención es el caso de un chico de un año que se atendió por guardia a las tres de la mañana por quemaduras en el tórax con heridas por pirotecnia”. Además, para la médica “evidentemente, un chico de un año no maneja pirotecnia, pero esto revela que hay falta de control por parte de los adultos”.

Por su parte, en el hospital Santa Lucía se atendieron 33 personas, de las cuales 20 eran menores de 15 años. Según, Juan Roqués, cirujano de guardia del centro de salud, “22 personas fueron asistidas con heridas en la vista por mal uso de pirotecnia, otras cuatro, por lesiones provocadas por corchos y el resto por otras causas”. En tal sentido, Roqués consideró que “no ha variado la cantidad de heridos con respecto al año pasado (fueron 31 casos) y eso se debe fundamentalmente a la falta de prevención”. Por el contrario, en el hospital oftalmológico Lagleyze “hubo menos cantidad de personas atendidas: este año recibimos nueve casos de quemaduras por pirotecnia en manos, cara y ojos, tres traumatismos por corchazos, dos traumatismos por piedrazos y un herido por perdigones de bala, mientras que en 2007 los heridos llegaron a 20”, sostuvo Costas. Asimismo, para la médica “los años de crisis económica se reduce la cantidad de heridos sólo porque la gente compra menos pirotecnia”.

Por otro lado, en Córdoba un niño de 10 años resultó herido por el estallido de un petardo, y otros ocho menores ingresaron con heridas al Instituto del Quemado local, en el que fueron asistidos además 9 adultos. En tanto, en Rosario fueron 13 los heridos por uso de pirotecnia, de los cuales siete eran menores de edad.

También los accidentes en distintas rutas fueron moneda corriente en la Nochebuena: nueve personas murieron y otras cinco resultaron con heridas de distinta consideración producto de la negligencia automovilística. El hecho más grave se produjo el miércoles, en el kilómetro 280 de la ruta provincial 11, a la altura de la localidad bonaerense de General Lavalle, donde chocaron de frente un Chrysler Neón y un Chevrolet Corsa. Como consecuencia del violento impacto, el conductor del Corsa y dos mujeres que lo acompañaban murieron en el acto y un menor de edad que iba junto a los fallecidos y el hombre que conducía el Neón resultaron heridos.