Una fuerte tormenta estalló ayer sobre el centro y el centro-norte del país, causando daños, cortes de luz, anegamientos y caída de árboles con fuertes vientos huracanados. Lo peor de los vientos se registró en Córdoba, Mendoza y San Luis, comenzando a la tarde temprano. Las lluvias violentas dejaron sin luz las localidades cordobesas de Malagueño, Villa Allende, Alta Gracia y Villa Allende, entre otras. En la capital voló un gran cartel en plena zona urbana y hubo anegamientos y caída de postes de luz. En Mendoza la tormenta arrancó hacia las 19 con fuertes granizadas en seco en General Alvear, seguidas de intensas lluvias. En algunos puntos del departamento mendocino el granizo fue tan grande que perforó hasta las membranas de techos y rompió vidrios y parabrisas. En la capital provincial el granizo llegó a los cuatro centímetros de diámetro y las lluvias provocaron cortes parciales de luz en la ciudad. En San Luis, la lluvia y el viento obligaron a cortar la ruta ocho cerca de Villa Mercedes, por la crecida de un río. El desplazamiento de la tormenta puso en alerta meteorológica a la provincia de Santa Fe e hizo que el gobierno porteño difundiera ayer “consejos” en caso de que llegue a la Capital.