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El nombre clave de las actuaciones de ayer es el de Marisel Llanes. Fuentes judiciales dijeron a este diario que la mujer, a quien la policía detuvo en el mismo “departamento privado” en el que demoró al intendente Villalba, es la cabecilla de una red que opera en Argentina y Chile. Llanes, de 27 años, regentea una serie de locales que promociona en la web mariseldesalta.com.ar, entre otros medios. Allí, según se podía comprobar al menos hasta ayer por la noche, se informaba que los servicios de Marisel operaban “en Jujuy zona centro sábados y domingos” y “en Salta zona centro lunes a viernes”. La web ofrece “total discreción, comodidad e higiene”, “servicio de bar, sala de show y poledance” y solicita reservar con anticipación de 30 minutos “para una buena atención”.

Según explicaron fuentes judiciales a Página/12, Llanes está asociada a un chileno apodado Marc Anthony que regentea un local famoso en Calama, un pueblo minero del país vecino. En ese lugar, El Señor de la Noche, hace dos años fueron liberadas al menos diez mujeres sometidas a esclavitud sexual. Durante el día de ayer, además de los tres locales de acceso público (Terra Nostra, Rumi y Quijote) y el privado allanados en la madrugada, los operativos alcanzaron a tres domicilios. Uno de ellos es el domicilio fiscal que Marc Anthony dio para asociarse a Llanes y ser propietario, junto con ella, del local de Calama.

Por su parte, Villalba es intendente de Profesor Salvador Mazza, una localidad distante unos 400 kilómetros de la capital salteña y lindera con la frontera entre Argentina y Bolivia. Ayer, liberado unas dos horas después de haber sido demorado por averiguación de antecedentes, regresó al pueblo, aunque pase más tiempo en su Formosa natal que allí.

Villalba revista en el Partido Renovador salteño y desde hace seis años es intendente de Salvador Mazza, una zona cada vez más castigada por delitos violentos asociados al narcotráfico y a la que algunos medios provinciales equiparan con la mexicana Ciudad Juárez. Ayer por la tarde, Villalba tenía apagado su teléfono celular y los teléfonos de la municipalidad sonaban siempre ocupados. Por la mañana, tras ser liberado, habló primero con Radio 10 y luego con el canal TN. En esta última entrevista se desmintió a sí mismo y explicó que en realidad no estaba “cerca” del lugar donde se había realizado un operativo, sino en “una casa particular”. De todos modos, reconoció que “podría ser” un prostíbulo. En la entrevista radial, dijo que cuando llegó la policía, en el lugar “había varias mujeres, era una sola persona o dos personas más. Dos personas más o tres supongo que éramos” (sic). Más tarde, en la entrevista televisiva, redondeó en “cinco personas”, aunque “cuando se hizo el allanamiento quedábamos tres personas en la casa”.