El presidente destacó que la "revolución democrática" en Bolivia es "imparable" tras el referendo sobre mandatos del pasado 10 de agosto porque, según dijo, dos tercios del país han apoyado el "proceso de cambio" impulsado por su Gobierno.

Insistió en que el diálogo con sus opositores "sigue abierto", pero pidió a los dirigentes autonomistas de las regiones de Santa Cruz, Beni, Pando, Tarija y Chuquisaca que "manden razones y no caprichos de grupos" para poder llegar a acuerdos.

Morales contrastó el momento "de avance y conciencia nacional" que atraviesa Bolivia con las protestas emprendidas por sus opositores autonomistas que, en su opinión, reflejan "la agonía de la derecha fascista y racista".

Dirigentes de varios movimientos sociales que participan en esta reunión confirmaron ayer su deseo de que la nueva Carta Magna de Bolivia se apruebe este año con la celebración de dos referendos, uno sobre el texto en su conjunto y otro sobre un artículo que no concitó acuerdo en la Constituyente referido a latifundios.

La oposición sostiene que legalmente no es posible que Morales convoque para este año al referendo constitucional, porque la normativa vigente sólo permite una consulta de alcance nacional por ejercicio y en 2008 ya se ha celebrado el referendo sobre mandatos del pasado 10 de agosto.

En esta consulta Morales quedó ratificado con un 67 por ciento de votos favorables. También sus principales rivales autonomistas obtuvieron amplios respaldos para continuar en sus cargos.

Tras la consulta, el primer intento de diálogo entre el presidente indígena y los prefectos opositores quedó en fracaso por sus diferencias por la devolución de una renta petrolera que el Gobierno recortó a las regiones a comienzos de año para pagar un bono de ayuda a la vejez.

Los dirigentes autonomistas de Santa Cruz, Beni, Pando, Tarija y Chuquisaca han activado en los últimos días un plan de protestas contra Morales en demanda de esos ingresos que ha incluido un paro general en estos departamentos, el bloqueo de carreteras nacionales y el corte de suministro de carne vacuna hacia las regiones andinas.

Para el próximo lunes los opositores han anunciado el bloqueo de las rutas internacionales que comunican Bolivia con Paraguay y Argentina.