Redrado, quien disertó en la reunión del Consejo de las Américas en el Hotel Alvear, destacó que la situación internacional y de los últimos meses en la Argentina, "puso a prueba la fortaleza de la política monetaria".

"El esfuerzo del Banco Central quedó plasmado en las políticas de reaseguro que permitieron revertir las salida de los depósitos", subrayó el titular del BCRA.

Destacó que a partir de la crisis financiera internacional, quedó demostrado que la Argentina está "transitando la senda correcta", gracias a la política aplicada por la autoridad monetaria.

"Aun no se vislumbra un piso para la crisis de los mercados de capitales internacionales, el fin de la espiral descendente está sujeto al fin del consumo, principalmente en los Estados Unidos", señaló el funcionario.

Al respecto, puntualizó que "toda acción será intrascendente si no se logra revertir la confianza de los ahorristas".

De todos modos, aclaró que América latina "no está en el epicentro de la crisis", aunque advirtió que la región no permanecerá "inmune" a los efectos de la situación internacional.

Redrado consideró que "los sólidos fundamentos (de la Argentina) que existían en 2007 y de los que hablaba el Banco Central, solo se corregirán si se profundiza la crisis internacional".

Para el titular de la autoridad monetaria, "los países con amplio déficit fiscal y de cuenta corriente han sido los más castigados" por la crisis.

"En la Argentina, una combinación de factores externos e internos provocaron una turbulencia que el Banco Central pudo detener gracias a una réplica rápida y quirúrgica que permitió detener la demanda de pesos y fortalecer la cotización del dólar", señaló Redrado.

A su criterio, "sin demanda de moneda doméstica, no hay tipo de cambio competitivo que resista".

En otro orden, y respecto de la situación de la Argentina, destacó que "el ratio entre la deuda externa y el Producto Bruto Interno está en términos manejables".

"Sólo necesitamos para mantener constante este ratio (en los niveles que requiere el mercado) un crecimiento anual de 1,3 por ciento, algo que superamos con holgura", destacó el funcionario.

Precisó que "sería necesario una caída de precios de 40 por ciento para que el ratio iguale al requerido" por los mercados.

Así, subrayó que "la solidez del sistema monetario y financiero evitó en los últimos meses la incertidumbre", que se generó en otro mercado mundiales.

Respecto de la deuda argentina, explicó que "en 2001, para hacer frente a los intereses, se necesitaba 22 por ciento de la recaudación tributaria, mientras que hoy solo se necesita 7 por ciento".

"Nosotros tenemos un superávit primario de 3,5 por ciento del PBI y se necesita 1,3 para mantener la deuda constante" en los niveles que se requiere internacionalmente, afirmó Redrado.

Finalmente, destacó que las políticas aplicadas en materia monetaria y fiscal tienen siempre como objetivo "un crecimiento económico con inclusión social".