"Ante los rumores de inestabilidad y de conspiración, este proceso no sufrirá retroceso hasta el 15 de agosto de 2013 cuando estaremos entregando a nuestro sucesor la banda presidencial", dijo Lugo en un mensaje leído en el palacio de gobierno en Asunción.

Tres mujeres diferentes dijeron en las últimas dos semanas ser madres de hijos de Lugo, a quien su ministerio eclesiástico le exigía celibato. El presidente reconoció a uno de los niños y este viernes dijo que está dispuesto a "una colaboración sin retaceos con la justicia".

Interrogado acerca de versiones sobre la existencia de más hijos suyos, se limitó a responder que "la confesión la doy a mis confesores".

Lugo prometió que tratará las denuncias "siguiendo tres criterios. En primer lugar, una colaboración sin retaceos con la justicia. En segundo lugar, la verdad siempre hasta el final. En tercer lugar, siendo interlocutor de la justicia y de la prensa, mi abogado particular será mi referente que dará la información sin retaceos".

"No estuvo en mi intención ofender a nadie y si alguien de la comunidad eclesial se ha sentido molesto o agraviado por esta situación a mí no me cuesta pedir perdón cuando reconozco que he faltado a la Iglesia, al país, a los ciudadanos, a los que han depositado la confianza en mí", indicó.

La situación generó un escándalo en este país con un 90 por ciento de población católica, y varios líderes opositores pidieron la dimisión del jefe de Estado.

"Tiene que renunciar. Es la única forma de salvar a la nación. Si fuera patriota y se da cuenta que ha caído en un total ridículo, Lugo tiene que irse y entregar el poder al vicepresidente Federico Franco", dijo el senador del Partido Liberal (oficialista), Alfredo Jaeggli.

Franco señaló estar "preparado para gobernar" en declaraciones a la prensa.

El presidente Lugo, que puso fin en abril de 2008 a 61 años de gobierno del Partido Colorado, lidera la Alianza Patriótica para el Cambio (APC), que está en minoría en el Congreso.

"El cambio no se detendrá. No permitiré que estas cuestiones privadas afecten las acciones de interés nacional", subrayó el mandatario. Y aclaró que los que esperan que renuncie "pueden esperar sentados".