El aumento de la deuda pública al 172 por ciento del PIB y la contracción económica que sufre el país, del 5,3 por ciento previsto para este año, devalúan además el efecto positivo del segundo paquete de rescate acordado por la eurozona el pasado 21 de julio por valor de 159 mil millones de euros.

Según la Oficina de Presupuesto del Parlamento, creada en abril para seguir la ejecución del presupuesto, "la notable subida de la deuda y el alto déficit primario han exacerbado al máximo su dinámica, que está fuera de todo control". Además, añadió, la gestión del gobierno ya no solventa los problemas económicos, por lo que es probable que en 2011 no se cumplan los objetivos de autosostenimiento.

De acuerdo con las estimaciones, la recesión alcanzará este año el 5,3 por ciento frente al 3,8 previsto inicialmente, mientras que el objetivo del déficit es que se reduzca este año hasta el 7,6 desde el 10,5 de 2010. El propio Gobierno admitió que esto no se cumplirá debido al empeoramiento de la coyuntura económica.

"Está claro que el problema del país no es sólo el volumen de la deuda pública, sino la incapacidad para consolidar la actual gestión fiscal. A pesar de los gigantescos esfuerzos para un ajuste fiscal, no se ha logrado un superávit primario. Al contrario, el déficit primario se está ampliando", indicó la oficina.