Según los medios oficiales, las explosiones se escucharon en toda la ciudad y las fuerzas de seguridad acordonaron todos los accesos al lugar y detuvieron a personas que estaban por los alrededores. El portavoz del CNS Omar Edelbe argumentó que el régimen pretende "desorientar a los observadores de la Liga Árabe" que ayer llegaron al país para comprobar el cese de la violencia, dado que ambas explosiones -dijo- se registraron al inicio de su visita.

Por su parte, según un comunicado del Ministerio sirio del Interior, un "terrorista suicida estalló su coche bomba en la entrada de un edificio de Seguridad en Damasco" y un minuto después otro hizo lo mismo con un vehículo todoterreno cerca del edificio de la Inteligencia General. "El modo de ejecución de estos atentados y la elección de lugares concurridos de gente conlleva las huellas de (la organización terrorista) Al Qaida y representa una escalada cualitativa en las operaciones terroristas de los grupos islamistas radicales contra Siria", fundamentó.

Según las autoridades, este doble atentado demuestra la "cara verdadera del plan que está enfrentando a Siria y que pretende perjudicar su seguridad y estabilidad". Estos nuevos hechos se registran mientras en el país se encuentra una delegación de la Liga Árabe para comprobar si el régimen cumple con la iniciativa árabe para solucionar la crisis que estipula, entre otros puntos, el fin de la violencia que desde marzo dejó un tendal de 5 mil muertos.