La problemática de las violaciones a los derechos humanos ha encontrado un canal de difusión en la gran cantidad de causas abiertas contra los represores responsables de la detención arbitraria, tortura y desaparición de personas durante la última dictadura militar. Este contexto resulta propicio para cuestionar el estado actual del respeto de los derechos humanos de las personas privadas de libertad.

Según datos de la subsecretaria de política penitenciaria del Ministerio de Justicia al 30 de junio de 2005: en la Provincia de Buenos Aires hay 29.791 personas privadas de libertad. De todas ellas, 24.892 están encerradas en establecimientos carcelarios que dependen del Servicio Penitenciario Bonarense y 4.899 en dependencias de la Policía de la PBA.

A esa fecha, el Banco de Datos de casos de tortura y otros tratos y penas crueles de la Defensoría de Casación registró 2.866 casos de tortura y malos tratos, de los cuales 848 ocurrieron en cárceles y 2.018 en el ámbito policial. A su vez, en 1.522 casos se efectuaron denuncias, mientras que 1.344 fueron conocidos bajo secreto profesional (de abogados defensores).

Un relevamiento realizado por la Procuración General de la Suprema Corte de justicia de la PBA para el periodo 1998-2002 arrojó que: sobre un total de 3.013 causas penales caratuladas como torturas y/o apremios ilegales, sólo un 1% había sido elevado a juicio.

En la que charla – debate, organizada por la agrupación universitaria NBI, expondrán Gabriel Ganon (Defensor General de San Nicolás) y Mario Coriolano (Defensor del Tribunal de Casación de la provincia de Buenos Aires y miembro del Sub-comité para la prevención de la tortura de las Naciones Unidas). Ambas personalidades se encuentran comprometidas en la denuncia de la realidad carcelaria y en la puesta en práctica de estrategias focalizadas para generar transformaciones en el sistema.

En el caso de Gabriel Ganon, el mismo fue autor del habeas corpus colectivo interpuesto a favor de todos los presos alojados en la unidad 3 de la localidad de San Nicolas.

Mario Coriolano fue elegido entre otras 10 personalidades de todo el mundo con experticia en materia de derechos humanos para integrar el nuevo Subcomité para la prevención de la tortura y otros tratos crueles, inhumanos y degradantes. Este nuevo órgano internacional tiene como objetivo establecer un sistema de visitas regulares y sorpresivas a los lugares de detención de los Estados Parte que hayan ratificado el Protocolo Facultativo de la Convención contra la tortura.