Argentina se quedó con las ganas de festejar un “Riocentrazo”. Con el aliento en contra de más de 3.000 ‘torcedores’, quienes colmaron las tribunas del Complejo Deportivo Ríocentro, de Río de Janeiro, el seleccionado masculino de handball no pudo en la final contra Brasil y debió resignarse a la medalla de plata en los Juegos Panamericanos 2007.

El equipo nacional cayó por 30-22 y perdió así la oportunidad de clasificarse en forma directa para los Juegos Olímpicos de Beijing 2008, la segunda chance directa que dispuso la Argentina de ser olímpico por primera vez en su historia.

Los brasileños ya ganaban el encuentro al término del primer tiempo por 11-6. El historial panamericano era ampliamente favorable a los brasileños, que habían ganado en Mar del Plata 1995 (20-18), Winnipeg 1999 (23-22) y Santo Domingo 2003, herida que hasta hoy seguía abierta, después de empatar en la final 24-24 y caer en el tiempo suplementario por 31-30. Los brasileños se quedaron aquella vez con el pasaje para Atenas 2004.

Restando 21 segundos para concluir el partido, el brasileño Leonardo escupió al argentino Facundo Torres y allí se produjo una gran batahola entre los jugadores de ambos equipos. Después de 10 minutos se reanudó el encuentro sin que se modificara el resultado.

Fuente: Télam