El campeón olímpico va por la recuperación. Luego de la dolorosa derrota en los segundos finales ante Lituania en el debut, la Selección Argentina de básquetbol se enfrentará hoy desde las 11.15 a Australia, equipo que también irá en busca de reivindicarse tras la caída inicial ante Croacia. Si bien una derrota igual dejaría al conjunto de Sergio Hernández con chances de clasificación para los cuartos de final, sería un duro golpe anímico y significaría encontrar luego un rival más peligroso.

La derrota en el debut fue un golpe fuerte, pero no hizo mella en el ánimo ni en la confianza del equipo. “Emocionalmente la derrota frente a Lituania fue un golpe duro. Fue un tropezón, pero las chances son firmes. Ahora quizá tenemos un poco más de presión, pero nada que este equipo no se pueda bancar”, sostuvo Emanuel Ginóbili, el emblema del conjunto argentino. “El grupo está intacto como siempre. Heridos, un poco tristes por cómo se perdió, pero también estamos con ganas de revertirlo.”

La confianza de Ginóbili tiene que ver con la realidad de este tipo de certámenes, en donde el pico del rendimiento tiene que aparecer en el cruce de cuartos de final y en los partidos por las medallas. “Vamos creciendo, cada día mejoramos un poco más. Yo diría que estamos mucho mejor que hace una semana y tenemos que seguir por este camino”, señaló Ginóbili. Y la experiencia así lo marca. En Atenas, el conjunto argentino perdió dos partidos –ante España e Italia– y finalizó tercero en la fase inicial, pero luego llegó a la medalla dorada tras ganarles en cuartos de final a Grecia, en semifinal a Estados Unidos y en la final a Italia.

“Quiero volver a festejar. Falta una buena alegría, que ojalá sea poder ganar mañana y volverse a casa con una medalla colgada en el pecho”, sostuvo Ginóbili. Para ello, el equipo deberá mantener por más tiempo la intensidad defensiva y no entrar en desconcentraciones, como le sucedió ante el rival de hoy en el Diamond Ball. En aquel partido, el equipo de Hernández llegó a perder por 19 puntos, aunque luego lo dio vuelta para llevarse el título.