El británico Andy Murray admitió que en la final del Abierto de tenis de Australia (que se disputaba en la madrugada de hoy) deberá jugar el mejor partido de su vida para derrotar al número uno del mundo, el suizo Roger Federer. “Tengo un juego que puede causarle problemas a Roger. Pero necesito jugar mi mejor tenis para derrotarlo a cinco sets”, señaló el número cuatro, que intentará convertirse en el primer británico desde 1936 –cuando Fred Perry ganó en Nueva York– en ganar un Grand Slam.

Murray sabe que está a un paso de escribir una página de gloria en la historia del tenis británico, pero para eso deberá alzarse en Melbourne Park con el primer título de Grand Slam de su carrera. “Enfrente tendré al jugador con más títulos de Grand Slams, 15, y tres veces campeón del Abierto de Australia. Necesitaré jugar el mejor partido de mi vida, soy totalmente consciente de ello. Eso es lo que planeo hacer. Si lo hago, tengo buenas posibilidades de ganar”, admitió Murray.

Los antecedentes no son buenos. En su única experiencia en una final de Grand Slam, el US Open 2008, Murray cayó ante Federer. “¿Qué debo hacer distinto esta vez? Sólo jugar mejor. Físicamente llegaré mucho más fresco”, afirmó el británico, que contó con 24 horas más de descanso que su rival tras vencer en semifinales al croata Marin Cilic, verdugo del tandilense Juan Martín Del Potro en octavos de final.