Con una jugada de pelota parada pergeñada por el DT Diego Simeone, San Lorenzo logró vencer como visitante por 1-0, gol de Bordagaray, a Atlético de Tucumán, que había arrancado mejor pero se quedó sin nafta.

Lo del Decano fue bueno en el comienzo, cuando logró imponer su ritmo, aunque le costaba generar situaciones. Pero el equipo de Boedo, que no manejaba bien la pelota, encontró la ventaja en una jugada preparada de tiro de esquina y cambió el partido: el Kily González la tocó corta para Gómez, éste sacó un centro que se cerró y rebotó en el palo izquierdo de Ischuk, y ahí nomás la tomó Bordagaray para poner de derecha el 1-0.

San Lorenzo pudo ampliar enseguida, pero Pintos, increíblemente, se lo perdió al intentar definir por arriba del arquero. El equipo de Oslvado Sosa ya no era el del arranque y San Lorenzo se animaba a ir por más.

Al comienzo de la segunda parte, Migliore se lució tapándole la igualdad a Vargas, en una jugada aislada, porque el conjunto tucumano seguía sin poder exponer sus ideas y se limitaba a tirar centros. En la desesperación, Oslvado Sosa sacó a Sarría y metió a Escobar para tener un delantero más en la cancha. La respuesta de Simeone fue casi inmediata: sacó a Sebastián González, un volante, y mandó a la cancha a un defensor, el debutante Benítez, para aguantar atrás, dispuesto para la contra. En el final, Rusculleda estrelló un tiro libre en el travesaño.