Domingo, 23 de diciembre de 2012 | Hoy
DEPORTES › LA ENTIDAD MADRE RECAUDA MILLONES Y LOS CLUBES SIGUEN PENANDO
A partir del último balance que ofreció la entidad rectora, posee dos plazo fijos en el Banco Credicoop por cerca de 26 millones de dólares, al cambio oficial. Al mismo tiempo, instituciones como Boca y River ofrecen sus cuentas en rojo.
Por Gustavo Veiga
A la AFA la vida le sonríe. Nunca más cierto, nunca más explícito quedó en su último balance la vieja expresión coloquial: “AFA rica, clubes pobres”. En otras épocas sucedió algo muy parecido, pero en el cierre del ejercicio de este año, su rendimiento haría emocionar a los recaudadores de la AFIP. Un ejemplo: tiene dos plazos fijos en el Banco Credicoop por 126.495.986,48 pesos, casi unos 26 millones de dólares al cambio oficial (25.815.507). Su superávit arrojó 28.533.123,62 pesos al 30 de junio. Organiza la segunda liga más competitiva del fútbol mundial, según el ranking que confecciona la Federación Internacional de Historia y Estadística del Fútbol (al 1º de enero de 2012). Sus números se robustecieron una vez más gracias al Programa Fútbol para Todos y a un ingreso adicional de su principal sponsor, Adidas. Pero de la asociación dependen 99 clubes directamente afiliados y 212 ligas del interior que están en una situación de endeudamiento reflejada a menudo por los medios. Si la AFA es la madre que tiene a cargo el cuidado y supervisión de sus hijos, los clubes, habría que analizar si cumple con la tutela que le encomendaron. A la vista no parece ser así. Ni siquiera en el caso de sus instituciones más representativas: Boca cerró su balance 2011-2012 con un déficit de 36.852.901 pesos y River que lo maquilló con una transferencia no concretada –la de Rogelio Funes Mori–, más que duplicó su pasivo de 127.026.313 a 297.842.795 pesos de la gestión de José María Aguilar a la de Daniel Passarella, un dueto que bien puede compararse en lo económico con las gestiones de los ex presidentes Carlos Menem y Fernando de la Rúa. El Tribunal de Cuentas de la AFA, que las dos principales autoridades de la casa, Julio Grondona y el secretario general Miguel Silva, elogian por su “meticulosidad” en la página 18 del referido balance, expresa cada año sus limitaciones para poner freno a los desaguisados de sus colegas, directivos que mal administran los clubes. Esa siempre fue la gran contradicción. “Es de destacar aquí que, como ha sido comunicado en reiteradas oportunidades al Comité Ejecutivo, las limitaciones en el proceso de sanción a los incumplimientos observados, atentan contra la capacidad de control del área a nuestro cargo.”
La Memoria del Tribunal de Cuentas que preside Juan María Manganiello, un contador peronista, quien además es periodista e hincha de San Lorenzo, enumera y clasifica por rubro los 876 expedientes que abrió (en el ejercicio 2010-2011 fueron 872). Van desde incumplimientos en ejecuciones presupuestarias a la no presentación de los presupuestos de la temporada 2011-2012.
Así como los gastos de la asociación suben cada año en un contexto de inflación, sus recursos también aumentan. En la asamblea en que fue reelecto Grondona hasta el 2015 el 18 de octubre del año pasado, los ingresos ascendían a 323.568.601,59 pesos y en el balance que se aprobó el último 25 de octubre llegaron a 391.775.241,25 pesos.
Los principales recursos ordinarios destinados a fines generales contemplan, entre otros ítems, derechos de TV y sponsors por 70.901.694,27 pesos, competencias de la Selección Nacional por 71.034.923,77 y sponsors de esta última por 55.874.076,21. Por la utilización de marcas también percibe 17.139.994,25 pesos y en el balance se precisa un recurso extraordinario que proviene de la FIFA, que es la asistencia a sus asociaciones nacionales por 2.994.751,89 pesos. Unos 611 mil dólares al cambio oficial. Parece poco de acuerdo con lo que representa el fútbol argentino en el mundo, pero alcanza para pagar varias cuentas.
José Lemme, tesorero de la AFA desde julio de este año, presidente de Defensa y Justicia y un incondicional de Grondona, agrega datos económicos adicionales en su informe a la Asamblea: “Como ha sido siempre la preocupación de esta Asociación, durante el ejercicio se obtuvo un préstamo del Banco Nación de 200.000.000 de pesos a devolver en cinco años para distribuir en el tiempo los recuperos de anticipos financieros realizados a los clubes”. En otro párrafo señala que “el ingreso adicional obtenido por el contrato renovado en el ejercicio anterior con Adidas Internacional colaboró y colaborará en el incremento de ingresos operativos de la Asociación”. Su institución, ubicada en Florencio Varela, ocupaba un discreto 13er puesto en el ranking de morosos de la AFIP (entre las que juegan el torneo de la B Nacional) que Página/12 publicó el 9 de enero de este año.
La nota empezaba así: “La lista de los clubes y la AFA que en conjunto le deben a la AFIP 274.794.025 pesos es tan extensa que están todos, o casi todos. Si hoy se les exigiera un libre deuda para jugar tres de los cuatro campeonatos profesionales del fútbol argentino, prácticamente ninguno de los 61 que participan en la Primera División, B Nacional y B Metropolitana (el restante es el Argentino A) podría iniciarlos”. Aunque lo más curioso de todo el informe venía después: “Es la asociación que preside Julio Grondona, el principal moroso con la AFIP, ya que le adeuda 47.756.468 pesos. Casi el doble de lo que debe River (24.477.185 pesos), el club que figura al tope del ranking de deudores”.
Los datos tienen poco menos de un año. Las cuentas del fútbol argentino merecerían estudiarse con más detenimiento. Se trata del hecho más popular y masivo. Una pasión que mueve miles de millones de pesos y que, como refleja el último balance de la AFA, sufre profundos desequilibrios entre la asociación madre y sus hijos, esos clubes descontrolados de los que apenas se salva un puñado.
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.