La Argentina y Venezuela profundizaron ayer la consolidación de sus relaciones bilaterales con la firma de un acuerdo para el establecimiento de una Alianza Estratégica. En ese contexto, los presidentes Néstor Kirchner y Hugo Chávez acordaron continuar con la exploración y explotación de zonas petrolíferas y anunciaron la construcción conjunta de una planta separadora de gases en Bolivia, la concreción de un programa de viviendas y la transferencia de tecnología. El acuerdo prevé también crear una comisión conjunta que en un plazo no mayor de 60 días debe presentar un plan para determinar acciones dirigidas a garantizar la integración entre ambos países.

Kirchner destacó que la Alianza con Venezuela “es un pacto cualitativo que viene a consolidar la perspectiva y la proyección de la región hacia el mundo” y destacó la necesidad de que “este espacio tenga la voz de fortaleza” para “responder a las expectativas de nuestros pueblos”.

En materia energética, los presidentes aprobaron lo actuado hasta el momento por las estatales Enarsa y Pdvsa y se acordó diagramar un nuevo plan de acción conjunta que contempla la voluntad de explorar formas alternativas de financiar las inversiones que resulten necesarias realizar en materia de exploración, producción e industrialización. Enarsa es actualmente titular de un área de la franja de Orinoco, donde se producen 300 mil barriles de crudo diarios. Como contrapartida la estatal venezolana explota un área offshore del golfo de San Jorge, frente a las costas de Chubut y Santa Cruz.

Además, se acordó avanzar en la posibilidad de construir de manera conjunta una planta separadora de gas y las obras necesarias en territorio boliviano para avanzar en la concreción del gasoducto que permitirá elevar a 20 millones de BTU las compras futuras de Argentina a Bolivia. Este incremento quedó estipulado en el convenio que firmaron días atrás Kirchner con Evo Morales. Según los protocolos, la obra debe ser concretada por la Argentina, a la que se sumará Venezuela en base al convenio suscripto ayer en Caracas.

También se firmó un Convenio de Colaboración y Asistencia Recíproca entre el Ministerio de Planificación Federal y la cartera de Hábitat de Venezuela, cuyo objetivo es elaborar un plan de asistencia técnica para el estudio de proyectos en materia de déficit habitacional que permita contribuir al mejoramiento de las condiciones de vida de los pobladores de ambas naciones. Este acuerdo beneficia fundamentalmente a Venezuela, pues la Argentina viene avanzando en un plan de construcción de viviendas, mientras que en Venezuela hay un fuerte déficit habitacional por falta de tecnología. Kirchner resaltó a su vez la trascendencia de reforzar los vínculos “tanto en el campo agrícola como en la producción de maquinarias” y confesó estar “deseoso de poder intercambiar y construir espacios que permitan la participación de otras empresas” de ambos países. No descartó incluso la “conformación de cooperativas que nos permitan cambiar los recursos técnicos y financieros que den respuesta a las asignaturas pendientes que ambos países tenemos para con nuestras sociedades”.