Con la intención de tener listo su gabinete para principios de diciembre, el presidente electo estadounidense Barack Obama, trabaja junto a sus asesores en sus oficinas de Chicago. Entre los nombres firmes que manejan figura el de la gobernadora de Arizona, Janet Napolitano, quien ocuparía el Departamento de Seguridad Nacional, según señalaron ayer fuentes demócratas al diario The Washington Post. Otros candidatos que están siendo considerados para ocupar cargos a partir del 20 de enero serían la empresaria de Chicago Penny Pritzker, para la Secretaría de Comercio, y el asesor de campaña David Axelrod, como consejero de la Casa Blanca.

Napolitano forma parte del actual equipo de transición de Obama y fue uno de los primeros líderes del Partido Demócrata que apoyó su candidatura a la Casa Blanca. Habiendo asumido como gobernadora en 2003, fue la primera vez que un demócrata alcanzaba tal cargo en Arizona. En 2006 fue reelecta para un segundo mandato como gobernadora por el estado que representa de McCain en la Legislatura estadounidense. Previo a esto, tuvo una exitosa carrera como jurista y en 1998 se convirtió en la primera mujer en llegar a la Fiscalía General también en este estado.

Según este mismo periódico, la gobernadora logró relevancia en la escena nacional en 1991, cuando representó a Anita Hill en un caso por acoso sexual contra Clarence Thomas (quien luego sería confirmado como juez para el Tribunal Supremo). A su vasta trayectoria hay que sumar que en 2006 fue la primera mujer que presidió la Asociación Nacional de Gobernadores.

Formada como abogada y con sus 50 años, es experta en problemas fronterizos y trabajó en temas sobre inmigración ilegal en Arizona, dado que este estado comparte 626 kilómetros de frontera con México, lo que lo hace uno de los que recibió mayor flujo de inmigrantes irregulares. En 2006 exigió que la Guardia Nacional (un cuerpo militar de reserva) participara en el control de la inmigración ilegal proveniente desde México (a expensas del gobierno federal), medida que luego fue aprobada por el presidente George W. Bush.

El lugar para el que estaría siendo postulada es la Secretaría de Seguridad Nacional, agencia gubernamental creada por el Congreso estadounidense luego de los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001. Este departamento no tiene injerencia directa sobre distintas agencias de inteligencia, control de las fronteras y tiene a su cargo la Patrulla Fronteriza compuesta por 16.000 agentes, y su principal función consiste en la protección de la ciudadanía de posibles ataques en territorio estadounidense y de catástrofes naturales.

Sorpresivamente, ayer el senador republicano John McCain (ex rival de Obama durante las últimas elecciones presidenciales) dio su aprobación para que se hiciera cargo del puesto.

De acuerdo con la cadena de noticias CNN, hay otros candidatos que entrarían en funciones a partir del próximo 20 de enero. Entre ellos se señala a la multimillonaria empresaria de Chicago Penny Pritzker (jefa de finanzas durante la campaña de Obama y miembro de la familia dueña de la cadena de hoteles Hyatt), es presentada como la máxima favorita para ocupar la Secretaría de Comercio.

Además, desde el equipo que coordina la transición dejaron trascender que Obama también seleccionó para un puesto clave de su futuro gobierno a otra figura de su entorno cercano. El principal estratega de su campaña electoral, David Axelrod, será el máximo asesor del futuro mandatario, ocupando el cargo de consejero de la Casa Blanca.

A través de la prensa estadounidense también se conoció la intención de que Obama y sus asesores designaran como futuro asesor legal de la Casa Blanca al abogado Gregory Craig, quien se hizo famoso a fines de los ’90 cuando defendió exitosamente al entonces presidente Bill Clinton en un proceso de destitución. Otro que también tendría un lugar asegurado una vez que Obama asuma como jefe de Estado es Eric Holder, quien ocuparía el puesto de secretario de Justicia, situación que lo convertiría en el primer fiscal general negro del país.

Finalmente, según los colaboradores de Obama aún resta definir la posible designación de la ex primera dama y actual senadora Hillary Clinton, quien está muy cerca de la Secretaría de Estado, lo que la transformaría en la jefa de la diplomacia de los Estados Unidos.