Luego de una dura campaña electoral, marcada por los ataques y las descalificaciones mutuas entre los principales candidatos, y en medio de una gran incertidumbre por los posibles resultados de las elecciones, algo más de 16 millones de peruanos acudirán hoy a las urnas para elegir al sucesor del presidente Alejandro Toledo, que dejará el poder en julio en medio de un mayoritario descontento popular a su gestión de cinco años. De este total de votantes, poco más de 450.000 lo harán en el extranjero, de los cuales más de 60.000 están habilitados para votar en Argentina. Por primera vez en la historia del país podrán sufragar los militares y policías, que en conjunto suman aproximadamente 150.000 votos, aunque muchos –se estima que el 50 por ciento– se quedarán sin poder hacerlo por estar destacados en ciudades distintas de las que están registrados. Cerca de 100.000 policías y militares custodiarán las elecciones.

Hay 18 postulantes a la presidencia, lo que marca un record histórico, pero sólo tres tienen posibilidades de convertirse en el próximo presidente del Perú: el ex comandante Ollanta Humala, de 43 años, quien con un discurso que cuestiona a la desprestigiada clase política se ha convertido en el elemento sorpresa de estos comicios; la ex congresista y abogada Lourdes Flores, 46 años, quien representa a la derecha; y el ex presidente del socialdemócrata partido aprista, Alan García, de 57 años, quien ya gobernó entre 1985 y 1990. Las últimas encuestas pronostican una llegada muy cerrada entre los tres, aunque Humala mantiene una ligera ventaja. Todos los sondeos adelantan que los tres están muy lejos de superar la barrera del 50 por ciento –su intención de voto está entre el 25 y el 30 por ciento–, por lo que habrá segunda vuelta. Humala parece el de mayores probabilidades para estar en el ballottage, pero el apoyo obtenido por el ex comandante se habría comenzado a debilitar en los últimos días –según las encuestadoras– y las distancias se han reducido al punto que algunas encuestas registran un triple empate técnico. Se espera una definición tan estrecha que los directores de las empresas encuestadoras han advertido que se deberían tomar “con mucho cuidado” los resultados basados en encuestas de boca de urna que se darán a conocer en el momento que se cierren las mesas electorales, a las cuatro de la tarde (seis de la tarde hora argentina), y recomendaron esperar los resultados del conteo rápido, que estas mismas encuestadoras darán unas dos horas después del cierre de las elecciones. Los organismos oficiales han anunciado los primeros resultados parciales para las ocho de la noche (10 de la noche hora argentina). También se votará por los 120 congresistas del Parlamento unicameral.

El ex comandante Ollanta Humala, quien ingresó al escenario político hace sólo ocho meses, pasó a encabezar las encuestas en el último mes de la campaña, desplazando a la derechista Lourdes Flores, que comenzó una sostenida caída. El ex presidente Alan García estuvo siempre en el tercer lugar, pero de a poco se ha ido acercando a los dos primeros y ahora es un candidato de fuerza para colarse en la segunda vuelta. En las elecciones del año 2001, al igual que ahora, todas las encuestas daban a García en tercer lugar, pero el día de las elecciones el ex presidente le robó el segundo puesto, y el pase al ballottage, a la derechista Flores por poco más de 150.000 votos. Una historia que podría repetirse hoy. Estas elecciones reflejan la división social del país. Mientras la conservadora Flores alcanza un respaldo que bordea el 70 por ciento en los sectores sociales altos y de la clase media alta, Humala apenas llega a superar el cinco por ciento en ese estrato social. Pero entre los pobladores de las zonas andinas del sur del país, la más pobre y excluida del país, Humala supera el 60 por ciento y Flores apenas llega al 10 por ciento. Otra división es la que existe entre la Capital y el interior del país. En Lima, Flores encabeza largamente las preferencias con cerca del 40 por ciento, mientras Humala bordea el 25 por ciento. En las provincias estos porcentajes se invierten. El ex presidente García ha buscado a lo largo de la campaña colocarse en el medio de esta polarización social.

Todo indica que hoy domingo los peruanos no elegirán un nuevo presidente, sino a los dos candidatos que compitan por la presidencia en una segunda vuelta. Y lo harán entre el ex comandante Humala, que habla de romper radicalmente con el neoliberalismo, pero que entre su indefinición ideológica y su organización partidaria prácticamente nula es incierto qué rumbo tomaría un eventual gobierno suyo; la derechista Flores, que ofrece continuar con el modelo neoliberal, aunque promete poner más interés en los temas sociales; y el ex presidente García, que se ofrece como una alternativa de cambio moderado, pero que carga en la espalda el peso del mal recuerdo de su gobierno, caracterizado por la hiperinflación, el crecimiento del terrorismo y denuncias de corrupción. Uno de los tres será el próximo presidente del Perú.