Miércoles, 8 de diciembre de 2010 | Hoy
EL MUNDO › EL JUEZ DE LA CORTE SUPREMA RAúL ZAFFARONI HABLA SOBRE EL SIGNIFICADO DE LAS FILTRACIONES DEL SITIO WIKILEAKS
Zaffaroni considera que la difusión de los miles de cables diplomáticos de Estados Unidos inaugura una nueva etapa en las relaciones exteriores: una que obliga a la transparencia y a la cautela. “Va a haber cambios de embajadores”, vaticina.
Por Irina Hauser
El juez de la Corte Suprema Raúl Zaffaroni es de los que piensan que, al menos por ahora, la filtración de los 250 mil cables diplomáticos a través de Wikileaks es más “divertida” que preocupante y más “lamentable” que peligrosa. Está convencido, eso sí, de que “inaugura una etapa nueva en la diplomacia y en las relaciones políticas”, en la cual la cautela será casi una condición necesaria y la “transparencia” la gran novedad.
–¿En qué consistirá ese cambio que usted vislumbra a partir de las revelaciones de Wikileaks?
–Seguramente va a aumentar la seguridad electrónica y los hackers incrementarán la intensidad tecnológica del hackeo. Nadie se va a sentir seguro de lo que vaya a decir en ninguna parte. Es una etapa que exigirá sinceridad y prudencia. Hubo un movimiento francés, en los años veinte, que decía que cada vez que uno se encontraba con alguien tenía que hablarle a esa persona con total franqueza, decirle exactamente lo que pensaba en ese momento. Como “no me gusta tu cara”. En las relaciones sociales y políticas sería expresarse con sinceridad.
–¿Qué consecuencias políticas traerán las filtraciones?
–No se descubrió nada secreto. No veo graves consecuencias. Todos sabemos que las embajadas mandan informes, lo que sucede es que no habíamos visto el texto que, en rigor, tampoco revela secretos de Estado. El contenido no es de gran trascendencia. Son opiniones de funcionarios, o lo que se recorta de los periódicos, o lo que algún diplomático habló con alguien y entonces reporta que “fulano me dijo tal cosa”. Lo que va a pasar es que se va a usar más el correo diplomático y menos el e-mail. Y los que hablan, ahora van a ser más responsables de lo que digan.
–Eso en cuanto a los países, digamos, “observados”. ¿Y cuál es el impacto para Estados Unidos?
–El problema que sí le va a traer a Estados Unidos es que seguramente va a tener que cambiar varios embajadores, los que hayan quedado en situación incómoda...
–¿A qué atribuye el extenso espacio que los diarios europeos les han dedicado a los cables sobre la Argentina?
–Para los diarios europeos es una comidilla interesante para subir el rating con chismes. Es divertido. Van difundiendo los cables y cada día se espera que aparezcan más.
–No aparece hasta ahora en las comunicaciones reveladas información sobre, por ejemplo, la instalación de bases militares en Colombia, o la movida golpista en Venezuela, por solo dar ejemplos más comprometedores.
–No sé cuál ha sido el nivel de imprudencia del gobierno norteamericano en esto. En los cables filtrados no imagino que haya grandes secretos, supongo que la información más delicada va por otras vías. Es lo lógico, aunque a veces la lógica falla.
–¿Aquí hubo una falla en la lógica?
–Han confiado en una tecnología y no se dieron cuenta de que hay una nueva dinámica de comunicación y que a medida que se perfecciona la tecnología se va de control.
–¿Qué nos dice acerca de Estados Unidos todo este sistema que ha quedado al desnudo?
–No descubrimos nada nuevo sobre cómo se maneja Estados Unidos. Lo que sorprende es eso: tienen la mayor tecnología y se les escapan 250 mil cables. A partir de ahora el mundo es más transparente. Todo esto es lamentable en un sentido, pero tiene un efecto positivo: el mundo necesariamente va a ir a una mayor transparencia, cada vez hay menos secretos. El propio poder planetario se vuelve menos secreto.
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.