Para la Justicia no hay dudas de que el gobierno menemista repartía sobresueldos entre sus funcionarios, pero Roberto Martínez Medina, el hombre que reveló cómo y quiénes los cobraban, podría ir preso. La jueza correccional Graciela Sarada Angulo de Quinn ordenó su captura porque no se presentó a un juicio oral por calumnias e injurias que le inició el ex juez de la Corte Suprema Adolfo Vázquez, a quien había señalado en un programa de TV como uno de los posibles destinatarios de aquel famoso plus que se distribuía en sobres en negro.

Martínez Medina fue secretario del ex ministro de Justicia Raúl Granillo Ocampo. En 2004, durante el juicio oral contra María Julia Alsogaray por enriquecimiento ilícito, contó que todos los meses retiraba de la Jefatura de Gabinete un sobre con 50 mil pesos para su jefe. No era el único beneficiario, dijo. Por su relato se abrió una causa penal en la que hace dos meses fueron procesados el ex presidente Carlos Menem, el ex ministro de Economía Domingo Cavallo, Granillo Ocampo y Alsogaray con embargos millonarios. Para entonces ya estaban procesados el ex ministro de Defensa Oscar Camilión y el ex jefe de Gabinete Jorge Rodríguez.

Durante los años en que se de-sarrolló la investigación penal de los sobresueldos, Martínez Medina –quien tenía protección como testigo en esa causa– fue acusado por dos personajes vinculados a aquella trama. Granillo Ocampo logró que un tribunal oral lo condenara por extorsión a un año y medio de prisión en suspenso. También fue condenado a dos años de cárcel por el juez Norberto Oyarbide en un juicio por calumnias que le había iniciado el abogado Javier Fernández, ex secretario de Rodolfo Barra en la Corte Suprema y ex auditor general de la Nación. Martínez Medina lo había señalado “valijero” de los sobresueldos en el Poder Judicial.

El día en que habló de Javier Fernández en un programa televisivo, Martínez Medina contó que había recibido un anónimo que lo señalaba como quien “repartía sobres de la SIDE” a los ex jueces supremos “(Adolfo) Vázquez, (Mariano) Cavagna Martínez y el propio Barra”. Ese fue el disparador de la denuncia que le hizo Vázquez. Con la unificación de las dos condenas previas, si lo volvieran a condenar, el ex secretario de Granillo Ocampo podría ir a la cárcel. El nuevo juicio oral tenía fecha de inicio el martes último, pero Martínez Medina desvinculó a su abogado, Enrique Piragini. El ex juez Vázquez sugirió que era una maniobra dilatoria, ya que el expediente prescribe el próximo lunes. La jueza Sarada Angulo le puso un defensor oficial y le dio un día más (anteayer) para presentarse. Como no lo hizo, ordenó su captura.

Su defensor pidió ayer la eximición de prisión, algo que la magistrada debería resolver hoy. El lunes ya podría plantear que el expediente caducó. “Los últimos años fueron una pesadilla para mí por la cantidad de presiones y amenazas que tuve. La estrategia de los involucrados es denunciar al testigo”, se quejó Martínez Medina al hablar con Página/12. “Imagínese la cantidad de gente y de dinero que hay involucrada en los sobresueldos. Es gente que puede quedar inhabilitada de por vida, que puede tener embargos millonarios. Mire lo que le acaba de pasar a María Julia, que le van a rematar la casa”, agregó.

Cuando procesó a Menem y compañía por peculado, el juez subrogante Marcelo Martínez de Giorgi afirmó que durante las presidencias del riojano se “ideó, se ejecutó y se desarrolló” un “sistema” para distribuir sobresueldos que se nutría de “dinero público”. Eran partidas para “gastos reservados”, que por ley debían usarse para gastos de seguridad e Inteligencia, pero iban a los bolsillos de múltiples funcionarios. Una pericia calculó que se repartieron 466 millones de dólares.