Para el juez Norberto Oyarbide “hay gatos encerrados” en la investigación sobre cuál fue el tipo de bomba hallada en el teatro Gran Rex. El magistrado volvió a hablar sobre el entredicho que tuvo con la Policía Federal, que desmintió su versión sobre el artefacto que iba a estallar durante una disertación del ex presidente colombiano Alvaro Uribe.

El cruce se produjo porque el día del hallazgo el juez aseguró que se trataba de un explosivo de poder letal, pero luego la policía aclaró que sólo era una bomba de estruendo.

Oyarbide realizó ayer una nueva inspección ocular en el teatro y sostuvo que “el martes, cuando ocurrió la denuncia, me mostraron un lugar totalmente opuesto al que hoy me enseñaron. El artefacto no habría estado en el segundo piso sino en el tercero”.

Consultado sobre la aparición de una nueva persona que dijo haber encontrado el artefacto, el juez afirmó “aquí hay cosas extrañas, como diría el común de la gente, hay gatos encerrados”.

Por otra parte, contó que el teatro tiene varias entradas y garaje, y las “llaves de esas puertas de adentro las tiene muy poca gente”.

El magistrado destacó que “es absolutamente importante aguardar las horas próximas porque se está trabajando muy a fondo para lograr el desgrabado de las filmaciones de las diferentes cámaras”. Oyarbide informó que espera que “lleguen además autoridades policiales procedentes de Colombia que van a sumarse con todos sus conocimientos a las autoridades argentinas”.

“Espero poder llegar a buen fin y poder establecer la verdad de lo que se trata, porque hay una preocupación a nivel internacional por este tema y creo que nuestro país debe dar una respuesta.”