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“A muchos les conviene lo que la Argentina hizo durante décadas, la bicicleta financiera, deber cada vez más y más y más”, acusó ayer la presidenta Cristina Fernández de Kirchner al inaugurar la muestra Expo Industria Berazategui 2013. Además, señaló que “lidiamos con la realidad, no vivimos en un mundo de fantasías; pero lo más importante es poder afrontarlas y solucionarlas”, enfatizó ayer luego de reflexionar que a su gobierno se lo criticaba por “las grandes transformaciones que realizó” en una década y acusó a “las balas de tinta que intentan derrocar o destituir a gobiernos populares”, apuntando a los multimedios que se posicionan corporativamente.

“Muchos creen que el pasado económico que quebró industrias y dejó a millones de personas sin trabajo y educación pasó, y no es así, siempre está a la vuelta de la esquina”, afirmó Fernández de Kirchner advirtiendo las propuestas en danza en el escenario político. La Presidenta recorrió la muestra situada en el sur del conurbano bonaerense en donde distintas empresas –entre las que se encuentran cooperativas de trabajadores– radicadas en la zona exponen sus productos industriales. “Las políticas económicas no son eternas”, agregó y apuntó a que “hay que tener un contexto y un proyecto de país económico y político que valore la industria nacional y genere trabajo bueno y bien pagado para todos los argentinos”.

La Presidenta encabezó la inauguración de la cuarta exposición industrial de Berazategui, en el Centro de Actividades Deportivas Roberto De Vicenzo. La mandataria fue acompañada por la ministra de Industria, Débora Giorgi; el gobernador bonaerense, Daniel Scioli, y el intendente de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde –candidato a diputado por el Frente para la Victoria en las elecciones de octubre– y el jefe comunal de Berazategui, Juan Patricio Mussi.

“Hay sectores minúsculos pero poderosos en su poder de difusión”, aseguró, y evocó una metáfora al señalar que “hubo balas de plomo que derrocaron al ex presidente Juan Perón, pero también hay balas de tinta que intentan derrocar o destruir a gobiernos populares”, aludiendo a la concentración de medios en manos de sectores corporativos. “Es un buen negocio endeudar a Argentina”, ironizó la Presidenta y recordó que durante la negociación del “megacanje, en el 2001, se renegociaron 31 mil millones de dólares y a los que intervinieron se les pagó una comisión de 150 millones. Unicamente por sentarse y endeudar al país. Algunos pueden ser tentados de endeudar otra vez a la Argentina”, enfatizó tras defender la decisión de reabrir por tercera vez el canje de deuda y graficó que el monto de la “quita de la deuda impulsada por Néstor Kirchner significa el equivalente a las Asignaciones Universales por Hijo, a las nuevas escuelas, a los planes de viviendas”.

“Nosotros hablamos de la década ganada, pero la Argentina tiene muchas décadas perdidas”, sostuvo la Presidenta y continuó señalando que “por eso cuando hablaba Patricio (Mussi, intendente de Berazategui) de lo que pasaba en el país hace apenas diez años, lo hacía porque quiere tener memoria, para que nunca más vuelva a suceder lo que pasó en Argentina y que nunca más haya décadas perdidas”. En la misma línea, defendió el acuerdo de YPF con la empresa de energía Chevron, porque “tenemos que ponernos como meta de futuro desde esta YPF volver a ser autosuficientes en materia energética, es una de las claves de la competitividad industrial” y agregó que “si seguimos dependiendo de la importación de combustible y energía, perdemos competitividad, un pozo no se perfora con préstamos del Banco Nación”. Allí reprochó el interés “de una jueza” para ver los “contratos firmados”, y agregó que en los ’90 “a ningún juez se le ocurrió pedir qué se estaba haciendo con la plata de los jubilados”.

Al finalizar tomó palabras de Mussi, quien había utilizado metáforas futboleras, al asegurar que “claro que depende del director técnico. Podés tener a Messi o a Maradona, y a unos cuantos otros, pero si el DT no sabe a dónde tiene que ir... Lo importante es saber que querés salir campeones y que querés hacer campeones a los 40 millones de argentinos”.