El diputado nacional y ex ministro de Economía, Axel Kicillof, aseguró en Río Gallegos que el Frente para la Victoria “va a volver” al poder si se profundiza “la militancia popular y territorial” en el rol opositor que le toca ocupar. Kicillof viajó a Santa Cruz para compartir con el ministro de Economía local, Juan Donnini, una charla sobre la actualidad política.

Allí, el referente de La Cámpora desestimó que las consecuencias de las decisiones económicas del gobierno de Mauricio Macri sean fruto de la “herencia” que dejó la presidencia de Cristina Fernández de Kirchner. “Le echan la culpa” al Frente para la Victoria “porque no pueden hacerse cargo ni siquiera de lo que piensan”, señaló.

“¿Cómo hicieron Néstor y Cristina, entonces, para poner de pie al país? Con el pueblo organizado, que nadie tenga dudas: vamos a volver”, agregó Kicillof, argumentando que el kirchnerismo debe “estar con la gente, más allá del blindaje mediático, y de que no pueda existir un canal de televisión o un diario que tenga una mirada diferente del neoliberalismo que plantea Cambiemos”.

Además, criticó las medidas del gobierno nacional al calificarlas como “desgracias que a muchos les servirán como un doctorado sobre política liberal”, y apuntó que el presidente Macri “no puede gobernar con el Parlamento cerrado y por encima de la Constitución, aún con la legalidad de los votos, ya que ganaron por un pelito” y tienen a la mitad del país en contra.

“Tenemos algo muy poderoso, que es la militancia popular y territorial –dijo Kicillof–. Si no nos dejan que exista un programa de TV o un diario que plantee otra posición, no nos afecta. Apelaremos a la militancia y las calles. Esa es nuestra tarea, la que nos encomendó Cristina.” El encuentro tuvo lugar en el comando del Frente para la Victoria en la capital santacruceña y participó un centenar de vecinos.

El ex ministro de Economía también denunció que “el gobierno de Macri hace cosas que no habían dicho en campaña”, como por ejemplo “despedir miles y miles de estatales llamándolos ñoquis, sin mostrar un solo papel”, y destacó que “casualmente empiezan a ser ñoquis cuando empiezan a retirar al Estado de determinadas funciones”.

Por último, hizo referencia a la construcción de las represas Néstor Kirchner y Jorge Cepernic, que el nuevo gobierno puso en duda. “Son de las obras energéticas más importantes en infraestructura. Hay que desconocer mucho la necesidad del país para pensar que dos grandes represas con la participación y las condiciones que se han conseguido de financiamiento chino se pueden cancelar con justificaciones mediáticas”, dijo.

“Las represas están en marcha y pararlas sería la peor noticia que podrían darse a ellos mismos, excepto que estén pensando en volver a un modelo de importación de combustible y venta de energía barata al exterior, como en los ’90. Si ese es el modelo que tienen en mente, me gustaría que lo digan a cara descubierta”, concluyó.