EL PAíS
El aumento de Sancho
El primer día de gestión del flamante vicegobernador en ejercicio de la gobernación, Carlos Sancho, tuvo lo que parecía faltarle a su antecesor: dinero y apoyo político. Ayer, un día después de que los docentes de Adosac (el gremio provincial, controlado por la izquierda) le amenizaran la asunción con una ruidosa protesta salarial, Sancho sorprendió con un aumento de 300 pesos mensuales permanentes y no remunerativos para todos los estatales. En una provincia como Santa Cruz, donde casi todo el empleo está vinculado al Estado, se trataba de una medida de repercusión positiva garantizada. Y de un contraste con las dificultades que tuvo Acevedo para concretar un incremento del 13 por ciento, que había prometido hace una semana. Sancho hizo el anuncio flanqueado por sus flamantes ministros de Economía, Juan Bontempo, y de Gobierno, Daniel Varizat. Después se recluyó en una larga reunión con el Presidente. Permanecieron varias horas en la gobernación, a salvo de los periodistas. Poco antes, Sancho había explicado que “para las categorías más bajas del escalafón significa un incremento del 30 por ciento en su poder adquisitivo”. Entre los colaboradores del Presidente confiaban en que la suba salarial permitirá aliviar el clima tenso que se vive en la provincia con algunos sindicatos, especialmente en Río Gallegos y en Las Heras.