La Corte Suprema confirmó la condena a cuatro años de prisión que se le impuso al represor de la Policía Bonaerense Jorge Bergés por sustituir la identidad de una menor nacida en cautiverio y entregada en adopción en la dictadura. El Tribunal rechazó un recurso extraordinario presentado por la defensa de Bergés porque “no refuta todos y cada uno de los fundamentos de la sentencia”, según afirmaron los jueces en el fallo conocido ayer. Bergés y Miguel Etchecolatz fueron condenados el 29 de marzo de 2004 a siete años de prisión por el Tribunal Oral Federal I de La Plata. La condena a Bergés luego fue rebajada a cuatro años, después de que su defensa apelara. Ambos fueron acusados de haber sustituido la identidad de Carmen Sanz, nacida en 1977 en el Pozo de Banfield, cuando su madre, Aída Sanz, estaba detenida. En el juicio quedó acreditado que Bergés firmó la constatación de nacimiento de la beba que luego fue entregada a una pareja que la anotó en Quilmes con el nombre de María de las Mercedes Fernández.