La llegada de los heridos a los hospitales sanjuaninos, luego de ser atendidos por los estudiantes.

Cuatro trabajadores murieron y otros 25 resultaron heridos, uno de ellos de gravedad, al desbarrancarse un micro que los llevaba a la ciudad de San Juan, procedentes de la zona de Calingasta, donde trabajaban en el tendido de una red eléctrica. Uno de los operarios accidentados, Mario Pérez, quien fue internado en el Hospital Rawson con una fisura en el pie, denunció que el accidente se produjo porque el vehículo que los llevaba “venía roto” y en esas circunstancias “el chofer (que falleció) quiso manejarlo sin frenos” en una zona peligrosa, con caminos de ripio, barrancas y precipicios. Pérez hizo responsable de lo ocurrido a la empresa de transporte Gallardo, propietaria del micro. El hecho ocurrió en la noche del viernes y, al principio, las víctimas fueron asistidas por un grupo de estudiantes de medicina que pasaba por el lugar y que estaba realizando una práctica para la cátedra de Emergentología.

“Tuvimos suerte porque los choferes del micro en el que íbamos nosotros se dieron cuenta de que pasaba algo raro y allí vimos a los obreros que se habían accidentado”, explicó a la prensa sanjuanina Emanuel Pizarro, uno de los estudiantes, que en la madrugada de ayer fueron recibidos como héroes en la terminal de ómnibus de San Juan, donde se reencontraron con sus familiares, los que pensaban –al comienzo, por falta de información– que los jóvenes eran los que se habían accidentado.

Por su parte, el operario Mario Pérez afirmó que el colectivo de la firma Gallardo se había roto “antes del accidente, antes de bajar a Calingasta (desde Puchuzum), un mecánico nuestro fue el que lo arregló”. Pérez aseguró que él vio que el vehículo “tenía problemas con el acelerador” y que con posterioridad “se quedó sin frenos y el colectivero quiso dominarlo con los cambios”.

Pérez aseguró que la empresa transportista es “la culpable de lo sucedido porque nos trajeron en un micro que no estaba en condiciones de viajar por un camino peligroso”. Por su parte, las autoridades del Centro de Operaciones de Salud Pública para la Emergencia Provincial (Cospep) destacaron que “la tragedia pudo haber sido mayor, si no fuera por la oportuna participación de los 24 estudiantes de la carrera de medicina de la Universidad Católica de Cuyo que auxiliaron a las víctimas del vuelco”. Precisó que son “estudiantes avanzados” a los que les falta rendir “al menos dos materias para recibir sus títulos de médicos, aunque ya aprobaron la materia con su actuación”.

Emanuel Pizarro (27), uno de los estudiantes, dijo que “el panorama era desolador, porque no había luz y no sabíamos la cantidad de heridos que teníamos, hasta que nos encontramos con algunos trabajadores que venían subiendo” para salir del lugar donde habían caído con el micro. “Estábamos asombrados porque no era un accidente común, eran muchos los heridos, pero por suerte teníamos tablas, collar y todo lo necesario para realizar los primeros auxilios. Así fue que entre nosotros y el chofer empezamos a coordinar quiénes eran los heridos que necesitaban atención inmediata.”

La tarea se hizo con la luz del colectivo en el que iban los estudiantes, con la de los celulares y con linternas. También hicieron una fogata para que los accidentados entraran en calor. “Lo que hicimos fue aplicar todo lo que sabemos en materia de primeros auxilios para reanimar a los lesionados. Hicimos lo que todo ser humano hubiese hecho, porque las personas pedían auxilio en medio de la oscuridad”, comentó Pizarro.

La empresa Eclesur, contratista de la obra eléctrica que se está haciendo en Calingasta, aseguró que los trabajadores no pertenecen a la firma. En un comunicado, señaló que son empleados “de la empresa Ecotrans”, que hasta ayer no había informado nada respecto de lo ocurrido. Sergio Gurgu, de Relación Institucionales de Energía San Juan, aseguró que Ecotrans tampoco estaba trabajando para la firma estatal.

El accidente ocurrió a las 22, 120 kilómetros al norte de la capital provincial. El micro se desbarrancó hasta caer al lecho de un río seco, en la Quebrada de Las Burras. Los obreros fallecidos fueron identificados como Luis Miguel Palma (38), Pascual Bazán (52), Miguel Angel Alvarez (38) y el chofer del transporte, Segundo Alejandro Cortés (65). Los heridos fueron llevados a los hospitales Guillermo Rawson de la capital provincial, y Juan Domingo Perón, de la localidad de Rodeo. En el Rawson quedaron internadas “22 personas con heridas y politraumatismos de diversa consideración”, además de un “herido grave que está en terapia intensiva”, identificado como Rubén Castillo (34). Los otros dos heridos fueron llevados al Hospital Perón.