Dos tanques que contienen cerca de 14 mil metros cúbicos de petróleo seguían ardiendo anoche en la planta de tratamiento de crudo de cerro Divisadero, a 20 kilómetros de la localidad mendocina de Bardas Blancas. El incendio, que comenzó en el mediodía del viernes, afectó a unas 14 personas, que tuvieron que ser internadas, aunque la empresa aseguró que “no hay heridos de gravedad”. En un comunicado, YPF hizo saber que “todo el personal y los puesteros que habitan en las inmediaciones fueron evacuados” y que se está realizando “un amplio operativo de trabajo con el objetivo principal de evitar la propagación del fuego, dándole prioridad absoluta a la protección de las personas”.

Ayer por la mañana, como consecuencia de la alta temperatura provocada por las llamas, “las paredes del tanque cedieron afectando la totalidad de la planta”, explicó la empresa, que decidió paralizar “preventivamente” las actividades en instalaciones cercanas. Como parte del operativo, Gendarmería Nacional instaló un puesto de control en la zona para facilitar el trabajo de los grupos que combaten el fuego, con la ayuda de aviones hidrantes.

En un parte oficial, YPF informó que la planta de cerro Divisadero “cuenta con seis tanques, de los cuales cuatro son de proceso y dos de despacho de crudo tratado. Estos dos tanques almacenaban al momento del siniestro unos 13.935 metros cúbicos de petróleo para ser enviados a la refinería Luján de Cuyo”, en la misma provincia.

Catorce personas fueron derivadas a centros asistenciales con “lesiones leves”, según señaló la compañía. “YPF confirma que no se registran heridos de gravedad como consecuencia del incendio que se inició ayer (por el viernes) en la planta de tratamiento de crudo cerro Divisadero.”

Sobre el operativo para tratar de controlar el incendio, se dijo que están trabajando “en forma conjunta con las autoridades provinciales y nacionales, que cuentan con autobombas de YPF, camiones cisternas, bombas de impulsión de agua, camión espumígeno, camiones de aspiración de fluidos, un helicóptero y seis aviones –cuatro hidrantes y dos sanitarios–, y tres ambulancias con personal médico”.

Se precisó que “los aviones hidrantes actúan para combatir el incendio, mitigando así el humo y la alta temperatura. Estos aviones están preparados para diseminar espuma de un producto especial para sofocar el fuego. Asimismo, las contenciones existentes entre la planta de proceso y el Río Grande están funcionando adecuadamente”. Se supo también que las autoridades de la empresa iniciaron una investigación para tratar de establecer cuáles fueron las causas del incendio.

La que colapsó en primera instancia, como consecuencia del siniestro, fue la estructura del tanque más grande, que cedió como consecuencia de las altas temperaturas. En ese momento, las llamas se propagaron a la totalidad de las instalaciones.

La planta de procesamiento de crudo de YPF en Mendoza, que ha sido destruida por el incendio, concentraba la producción de diez yacimientos del área de Malargüe, lo que representa el 3,80 por ciento del total de la empresa. YPF precisó que la planta recibía la producción de los yacimientos de Los Cavaos, cerro Fortunoso, Río Grande, Malal del Medio, Llancanello, cerro Divisadero, Loma Alta Sur, Loma de la Mina, Puesto Muñoz y cerro Mollar.

La producción de esa decena de pozos totaliza 1460 metros cúbicos de petróleo diario y representa el 3,80 por ciento de la producción de YPF y el 14 por ciento de la producción de la Regional Mendoza, según señaló un parte de prensa de la compañía. YPF tiene un total de 37 plantas similares a la que está en llamas. En esos lugares se recibe la producción de los distintos yacimientos y se la acondiciona para ser enviada a las refinerías de La Plata, Luján de Cuyo y Plaza Huincul, para luego elaborar las naftas y los demás productos derivados del petróleo.

De los seis tanques que tenía la planta de cerro Divisadero, cuatro son de proceso y dos de despacho de crudo tratado. En uno de los comunicados, la empresa aclaró que la refinería de Luján de Cuyo está funcionando “con normalidad y dentro de las condiciones que tenía previsto”. La firma hizo saber que cuenta con “mecanismos alternativos de procesamiento”. La información oficial señaló que “las instalaciones de YPF y la capacidad operativa de sus contratistas permiten establecer distintos mecanismos de procesamiento para restablecer la producción de los pozos que son parados preventivamente” en las presentes circunstancias.

La planta donde se produjo el accidente está ubicada en un lugar semidesierto, donde sólo hay algunas casas, muy separadas unas de otras. Anoche seguía el combate contra las llamas, que seguramente seguirá durante todo el fin de semana largo.