Las víctimas son una abogada de 58 años y un colega de 65. El agresor, un obrero de la construcción de 62 años, fue detenido cuando intentaba escapar. "Esta desgracia está cerrada", dijo a la prensa el comisario Rubén Alberto Dallacosta, jefe de la seccional 15, con jurisdicción en el lugar donde ocurrió el doble crimen.

El hecho se produjo a las 15.10 en un estudio de mediación laboral situado en el piso 6, oficina 602, de un edificio de la calle Paraguay 643, a media cuadra de Florida, en el corazón del microcentro porteño.

Según fuentes policiales, hasta el lugar concurrió un obrero de la construcción con su abogada para participar de una audiencia de conciliación por un juicio laboral contra la empresa en la que trabajaba.

El comisario Dallacosta señaló que en un momento de la reunión el hombre, "al no recibir la respuesta que realmente esperaba reaccionó imprevistamente" y sacó un cuchillo de entre sus ropas, con el que primero apuñaló a una de las abogadas del estudio y luego a su secretario, que salió en defensa de la mujer.

Si bien el jefe policial se negó a brindar las identidades de las víctimas, señaló que se trata de "la titular del estudio jurídico y un empleado".

Según fuentes allegadas al caso, el lugar es un estudio de mediación que trabajaría para el Ministerio de Trabajo, que estaría a nombre de los letrados Marta Charaf, Federico Castro Nevares y María Teresa Autillo. Pero trascendió que, aunque los nombres están en las placas profesionales, ese letrado habría fallecido y Autillo habría estado en otra oficina.

El hecho se produjo ante una gran cantidad de personas que se encontraba en la oficina, incluida la abogada del obrero, que sufrió una crisis nerviosa por lo que tuvo que ser atendida.

Los dos abogados resultaron gravemente heridos y fallecieron a los pocos minutos, mientras que el agresor escapó por las escaleras.

Un cliente que en ese momento llegaba al estudio vio correr al hombre cuchillo en mano y comenzó a perseguirlo. A su vez, el portero del edificio -que escuchó los gritos provenientes del sexto piso- ya había avisado a un policía que realizaba tareas de seguridad adicional en la cuadra.

En el palier del edificio el obrero fue interceptado por el policía y el cliente que comenzaron a forcejear con él, hasta que fue detenido.

En el forcejeo el cliente recibió cortes leves en sus brazos y fue atendido en el hospital Pirovano.