A las bolsas del mundo no les alcanzó la inyección de liquidez que concedió la Reserva Federal norteamericana y volvieron a apuntar decididamente hacia abajo, como reflejo de la desconfianza de los inversores.

Bajo esa sombra, la Bolsa porteña no pudo escapar al pesimismo que viven los mercados internacionales. El índice Merval de las empresas líderes despidió la semana con una baja del 1,52 por ciento.

El principal mercado del mundo, Wall Street, terminó con un rojo de 1,60 por ciento y como en todos lados se vive el mismo escenario de negocios - las plazas europeas ya habían cerrado con pérdidas-. la Bolsa de San Pablo, Brasil, cayó 0,46 por ciento.

El disparador del miedo fue el deterioro significativo de su liquidez que reconoció el banco de inversión norteamericano Bearn Stearns, que llevó a sus acciones a perder hasta un 50 por ciento poco después de la apertura de Wall Street.

El pedido de emergencia fue atendido por el banco JP Morgan y la Fed, que acordaron prestarle fondos por 28 días, pero la noticia empañó una señal que podría haber revitalizado los mercados.

La inflación minorista en Estados Unidos no ofreció variantes durante febrero, contra el 0,3 por ciento esperado, un dato que le daría margen a la Fed para recortar la tasa de referencia.

En la Bolsa porteña la baja fue acompañada por un menor volumen de negocios (se operaron $ 112,45 millones) y las pizarras depararon caídas de hasta 7,95 por ciento, como fue el caso de Della Penna.

En orden de importancia siguieron las bajas de Concesionario del Oeste, 7,84; Grupo Financiero Galicia, 3,50; y Polledo Construcciones que perdió 3,44 por ciento.

El miedo a una recesión en los Estados Unidos y la consiguiente mayor aversión al riesgo, también impactó en los bonos argentinos.

Precisamente la confianza del consumidor norteamericano cayó a principios de mayo a un nuevo mínimo de varios años, confirmando que la economía está en recesión.

Los operadores locales, como ya es costumbre, estuvieron con un ojo puesto en las pantallas que aportaban datos sobre lo que ocurría en los mercados extranjeros y muy pocos se acordaron de las recomendaciones de tomar posiciones en las series que lucen precios atractivos.