Garré lo expresó al encabezar el acto en conmemoración del Día del Veterano y de los Caídos en la guerra de Malvinas, que se llevó a cabo en el microcine de la Escuela de Suboficiales "Sargento Juan Bautista Cabral", con asiento en Campo de Mayo.

"De ninguna manera renunciamos a nuestros derechos. Pero el camino para hacerlo efectivo es el de las negociaciones diplomáticas, el de la prédica y del reclamo permanente", subrayó Garré.

Añadió que fiel a ese mandato, la presidenta Cristina Fernández en la II Cumbre de Presidentes de América del Sur y de los Países Arabes en Qatar, que incluyó el tema Malvinas en su declaración final, "realizó un encendido reclamo, mientras abogaba por un orden internacional multilateral y multipolar como una cuestión estratégica y vital".

Precisó que los 27 años transcurridos "han permitido una reflexión serena que posibilitó que nuestro pueblo distinguiera claramente entre la irresponsable aventura dictatorial y la causa irrenunciable de Malvinas y revalorizara con justicia a los combatientes y a su heroico comportamiento". La ministra señaló que la guerra de Malvinas "fue un crimen más de la dictadura con secuelas muy dolorosas si consideramos los costos humanos, y muy negativas si analizamos los intereses nacionales".

"A estos gravísimos desaciertos la dictadura agregó después de la guerra una deliberada política de olvido sobre lo sucedido para atenuar su responsabilidad histórica" y añadió que con ese olvido "condenaron a los que combatieron heroicamente en medio de la improvisación y la escasez de lo más elemental", sostuvo.

Para Garré, ese "olvido" incluyó "literalmente esconder a los soldados sobrevivientes y abandonarlos a su suerte, como si en vez de ser las víctimas fueran los responsables de la derrota. Con el olvido se pretendió impedir la verdad sobre esta capítulo de nuestra historia y negar la memoria a las generaciones por venir".

Anunció además que el ministerio a su cargo habilitó a partir de hoy un servicio gratuito de información telefónica para brindar atención personalizada a los Veteranos y que tiene el propósito de responder y derivar adecuadamente con personal especialmente capacitado para esta tarea consultas y solicitudes a los ex-combatientes.

Por su parte, el subjefe del Estado Mayor Conjunto, almirante Juan Marín, destacó la "entrega, vocación y espíritu de sacrificio de aquellos que tuvieron el honor de combatir por la Patria".

Subrayó el heroísmo de los combatientes "no sólo por haber enfrentado a un oponente logística y tecnológicamente superior, sino también por las dificultades, que implicaron, un mayor esfuerzo en el campo de combate, producto en algunos casos de las imprevisiones en los máximos niveles de planeamiento y conducción integral de la guerra".

Marín, un ex combatiente de Malvinas, recordó el "rigor que impone el combate, donde la mente y el cuerpo humano son llevados a límites imaginables y en honor a ellos y a nuestros muertos los convoco a continuar en la búsqueda de la necesaria unión de todos los veteranos, para mantener viva la legítima y noble causa de Malvinas".

El acto contó con la asistencia de los jefes del Ejército, general Luis Pozzi; de la Armada, almirante Jorge Godoy; y de la Fuerza Aérea, brigadier Normando Costantino y otras autoridades civiles y militares, así como ex combatientes.