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En un multitudinario acto de cierre de campaña en Madrid, Rajoy aseguró que "cada voto por el cambio será para el futuro de los españoles y, cuanto más seamos, más pronto superaremos las dificultades, y más claro lo verán fuera de España", con lo cual, según el líder del PP, conseguirán "la solución al aumento del riesgo país que colocó a España en pánico" 48 horas antes de las elecciones.

Frente a unos 20 mil simpatizantes, que llenaron el Palacio de Deportes de Madrid -en el que estuvo presente el ex presidente José María Aznar-, el líder del PP consideró que "el mejor mensaje a Europa, al mundo y a los de la prima de riesgo es decir que aquí hay una gran sociedad que apoya el cambio político y que no está de acuerdo con lo que se ha hecho en estos años".

Por su parte y en su acto de cierre, el candidato socialista Rubalcaba hizo un llamado a la calma y pidió al Banco Central Europeo (BCE) que "intervenga de una vez" para solucionar la crisis de la zona euro y defender la moneda única de los ataques especulativos.

Además, apeló a los "progresistas de España", a quienes les pidió el voto "para que la derecha no pueda utilizar la crisis como coartada para recortar los derechos sociales" y para evitar que el PP "no tenga un poder absoluto".

A dos días de las elecciones generales, España sigue sin generar suficiente confianza en los inversores y no consigue alejarse de la zona de rescate. Tras haber escalado su riesgo país hasta los 500 puntos básicos, España tuvo que pagar una rentabilidad del 7 por ciento para endeudarse, la más alta en 14 años y el mismo costo de endeudamiento que obligó a Europa a otorgar "rescates" financieros a Grecia, Portugal e Irlanda.