Unas seis lanchas rápidas con ambientalistas de Gualeguaychú pasaban por entremedio de tres barcos de la Prefectura uruguaya, con banderas argentinas y uruguayas.

La protesta de los ambientalistas de Gualeguaychú se desarrollaba en un clima pacífico, con cánticos en los que declaraban ilegal a Botnia y pedían que cesen de contaminar la región.

El presidente uruguayo Tabaré Vázquez encabezará el acto de inauguración del puerto en Nueva Palmira, rodeado de su gabinete y representantes del gobierno de Finlandia.

Por su parte, los ambientalistas uruguayos expresaban también su rechazo a la pastera Botnia en Nueva Palmira, en medio de un fuerte dispositivo de seguridad dispuesto ante la llegada al lugar del presidente uruguayo Tabaré Vázquez.

"Apenas pudimos acercarnos a un kilómetro de donde se realizará el acto oficial de inauguración del puerto de Botnia. El vallado es muy importante", dijo Ayelén Borgoña, una de las integrantes del movimiento Uruguay Natural, compuesto por agrupaciones ambientalistas rurales y urbanas del país oriental.

Relató que en el lugar había alrededor de 50 personas y argumentó que "no son más porque fue muy fuerte la campaña que realizó el gobierno para amedrentar a la gente para que no participe de estas protestas".

"El gobierno infundió el miedo", lamentó la ambientalista uruguaya, quien aclaró que "la protesta se realiza en forma pacífica, con pancartas, banderas uruguayas y argentinas y tres personas disfrazadas de muerte, representando a las pasteras Ence y Botnia y a Insusa (que produce ácido sulfúrico).

Ayelén contó que los uruguayos que protagonizan la protesta son de las localidades de Agraciadas, Colonia, Colonia Sacramento, Conchillas, Nueva Helvecia, Tararira, Rosario y Nueva Palmira.

Los ambientalistas uruguayos rechazan la instalación de Botnia por considerar que "destruye el modelo de desarrollo del país y su tejido social" y consideran que se trata de "un proyecto impuesto por empresas multinacionales al gobierno uruguayo, que le dio la espalda al pueblo", según se explicó.

Desde este puerto, Botnia exportará su producción de pasta de celulosa proveniente de su planta de Fray Bentos, localidad uruguaya que se encuentra sobre la margen oriental del Río Uruguay, justo frente a Gualeguaychú, en Entre Ríos.

El Río Uruguay es un recurso hídrico compartido por Argentina y Uruguay y su Estatuto establece la autorización de ambas naciones para cualquier actividad que pueda modificar el ecosistema en la región, algo con lo que Uruguay no cumplió.

El reclamo de Gualeguaychú también es de Argentina, que llevó a la Corte Internacional de Justicia de La Haya una demanda contra el Estado uruguayo por violación del Estatuto del Río Uruguay.

Los habitantes de Gualeguaychú piden la relocalización de Botnia fuera del Río Uruguay porque consideran que la planta contamina el medio ambiente y perjudica la salud de la gente de la región.