River inició ayer la búsqueda de un horizonte mejor, y el triunfo ante Racing fue el primer paso positivo. El plantel conducido por Leonardo Astrada fue apenas un poco mejor que su rival, y le alcanzó con la capacidad de sus jugadores para aprovechar dos jugadas detenidas. Racing no tuvo lucidez y cortó una racha de dos triunfos seguidos.

Racing comenzó el partido tomando el control de la pelota, a partir del despliegue que realizaban sus volantes en la mitad de la cancha. Mientras Yacob y Falcón mostraban firmeza en el centro de esa zona, Mercado por derecha y Lucero por izquierda se desprendían con continuidad para acercarse con peligro al área de Vega.

El arquero de River tuvo que exigirse por primera vez a los cinco minutos, cuando reaccionó bien ante un cabezazo de Yacob, luego de conectar un envío desde la izquierda. Dos minutos más tarde, Ramírez cayó en el área luego de forcejear con Ferrari, y si bien el delantero reclamó penal, el árbitro no lo sancionó. Racing seguía buscando, y Vega volvió a aparecer para tapar un cabezazo de Lucero, después de un desborde de Lugüercio.

River recién empezó a mostrar síntomas de reacción cuando habían pasado los 20 minutos. Y en la primera llegada en profundidad, Bou perdió en el mano a mano con De Olivera, que le tapó el remate con la cara. En su segunda aproximación, River se encontró con un penal por una mano de Lucero, y Buonanotte se encargó de darle la ventaja a su equipo. Antes del final del primer tiempo, el local aumentó la diferencia con otra acción detenida, esta vez de tiro libre, donde Abelairas ubicó la pelota en el ángulo para concretar el segundo festejo.

Racing salió con un poco más de decisión a jugar el segundo tiempo, pero careció de claridad en los últimos metros. La mejor aproximación de los de Avellaneda fue con un cabezazo del ingresado Caballero, pero la pelota salió al lado del palo. River controló el desarrollo y hasta estuvo cerca de marcar el tercero con un tiro de Bou.