Domingo, 10 de junio de 2007 | Hoy
DEPORTES › PEDRO TROGLIO, FUTURO TECNICO DE INDEPENDIENTE
El entrenador asume el desafío que representa dirigir a un grande y apuesta a ganador. “Hay que recuperar la mística”, asegura.
Por Leonardo Castillo
Las negativas de Carlos Bianchi, Marcelo Bielsa y Américo Rubén Gallego a dirigir a Independiente en la próxima temporada obligaron a los dirigentes a la búsqueda de una nueva alternativa, la que les ofreció un entrenador joven, con ganas de tener una revancha tras su repentina salida de Gimnasia, a principios de 2007. Por eso, a los 42 años, Pedro Troglio admitió que ser el técnico de un equipo grande es la “la gran oportunidad” de su carrera, y dejó en claro que posee un objetivo bien ambicioso: lograr que la entidad roja recupere la mística copera que alguna vez supo ostentar. El ex volante de la Selección Argentina afirmó que si bien posee un buen plantel, pretende algunos refuerzos “para pelear arriba”. Anticipó además que trabajará en estrecha colaboración con el actual DT, Miguel Angel Santoro.
–¿Por qué cree que el presidente de Independiente, Julio Comparada, se decidió por su contratación?
–Creo que le dejé una buena impresión en la primera charla que tuvimos. Le dije cuáles eran mis ideas respecto del equipo, lo que pretendía, cómo me gustaría que jugara, y al otro día me llamó y me dijo que era el próximo técnico de Independiente. La verdad que me sorprendió la rapidez que tuvo para decidirlo.
–¿Hubo gente en la comisión directiva que no estuvo de acuerdo?
–Y bueno, los tendré que convencer con mi trabajo al frente del equipo en los meses por venir.
–¿No hubiera sido mejor trabajar desde ahora con el plantel, dirigirlo en estos últimos dos partidos que le quedan al Clausura?
–Hubiera sido una locura. Mejor era esperar a que terminara el torneo, ¿para qué interferir ahora con el laburo que está llevando a cabo Santoro? Hubiera sido una falta de respeto. Mi gestión comenzará el 2 de julio.
–Durante la gestión de Jorge Burruchaga, Santoro fue relevado de su tarea habitual, que era la de entrenar a los arqueros del primer equipo, ¿volverá ahora a desempeñar ese rol?
–Sí, lo quiero en mi cuerpo técnico, es una persona de mucha experiencia, a mí me sirve tenerlo cerca. Es una tranquilidad contar con Pepé. Además va a ser el coordinador general de fútbol y nos va a tener al tanto de todo lo que pase en las inferiores.
–¿Qué impresión tiene del plantel que tendrá a su cargo?
–Es buena, la verdad que no es menos de lo que hay en el fútbol argentino. Con dos o tres refuerzos podemos dar pelea y estar bien arriba.
–Les pidió a los dirigentes la incorporación de dos laterales. ¿Eso quiere decir que apuesta a desarrollar una propuesta de mucha dinámica con Independiente?
–Pretendo que seamos un equipo rápido, que ejerza presión en todos los sectores de la cancha, que tenga mentalidad ofensiva. No vamos a ver una propuesta de juego demasiado distinta a la que mostró Gimnasia cuando lo dirigí. La única diferencia es que no pienso usar la línea de tres. Por las características de los jugadores que tenemos, seguramente jugaremos con cuatro defensores.
–¿Su idea es pelear por la obtención del próximo campeonato?
–Por supuesto, vine a Independiente para ser campeón, no me conformo con sumar 50 puntos a lo largo de la temporada. Hay que ir por la gloria, y por eso estoy acá. Quiero que Independiente recupere la mística que tenía cuando jugaba y ganaba la Copa Libertadores.
–¿Pero no parece un objetivo demasiado pretencioso para un club que atraviesa un presente deportivo tan complicado?
–No, éste es un equipo grande y tiene que aspirar a lo más alto. Además qué importa el presente. ¿Quién dice que no se puede revertir? Si no, miremos lo que pasaba con San Lorenzo hace seis meses y fijémonos ahora, que está por salir campeón. Todo pasa por una cuestión de mentalidad.
–El hincha de Independiente tiene fama de exigente. ¿Cómo piensa seducirlo para que respalde su gestión?
–Con trabajo y resultados. No hay otra.
–¿Qué balance hace de su paso por Gimnasia?
–Para mí fue muy bueno. Jugamos cuatro campeonatos, quedamos quintos en el promedio, logramos un subcampeonato y nos clasificamos a las copas. Lo que pasa es que la derrota por 7-0 en el clásico con Estudiantes y aquel 4-1 con Boca, con tantos hechos extradeportivos en el medio, fueron una bisagra que terminaron por empañar una campaña que había sido muy buena. Y eso es algo que la gente de Gimnasia reconoce aún hoy.
–A propósito de aquel partido con Boca y de las presiones que sufrió el equipo por aquellos días. ¿Hay algo de lo que se arrepiente?
–Sí, de haber dado la cara y de salir a explicar un hecho que debían aclarar otros. Pero ya está, es historia.
–¿Cómo quedó entonces su relación con el presidente de Gimnasia, Juan José Muñoz?
–En lo económico bien, siempre me cumplió. Pero nuestro vínculo se deterioró cuando la gente, en la cancha, comenzó a insultar a la comisión directiva, mientras que el cuerpo técnico era respaldado. Lo mejor que quedó de mi paso por Gimnasia fue el cariño de los hinchas. Sé que algún día voy a volver.
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.