Once personas murieron y veintidos resultaron heridas en un atentado suicida con coche bomba cometido ayer en el centro de Bagdad cerca de la plaza de Tahrir, contra el convoy del ministro iraquí de Trabajo, Mahmud Jawad Al Radi, según informaron fuentes de los ministerios de Interior y Defensa.

El ministro, que viajaba en el convoy, salió ileso del atentado, señaló el portavoz del Ministerio de Trabajo, Abdalá Lami. Al Radi, quien no milita en ningún partido político, pertenece a la alianza chiíta del primer ministro Nuri al Maliki.

“El ministro estaba en el convoy pero no fue herido”, indicó Lami. En cambio tres de sus guardaespaldas perdieron la vida, señaló el Ministerio de Interior. El conductor del coche bomba “intentó penetrar en el séquito para tratar de matar al ministro de Trab ajo y provocó la muerte de tres guardaespaldas, entre ellos un sobrino del ministro”, reportó Lami.

“Fue un crimen coordinado por terroristas que pretenden bloquear los avances y la reconstrucción de Irak”, denunció. Cuatro coches, incluyendo uno de la policía, resultaron carbonizados por la explosión y las vitrinas de numerosas tiendas fueron destrozadas, comprobó un periodista de la agencia noticiosa AFP. Por otra parte, la agencia de noticias Aswat al Irak informó, citando a la policía, que soldados estadounidenses mataron hoy por error a una mujer en la ciudad de Bakuba, situada al nordeste de Bagdad. Otra mujer y un hombre sufrieron heridas de bala.

Las fuerzas de seguridad iraquíes asumieron ayer el control de la provincia de Babilonia, al sur de Bagdad, donde se encuentra el “triángulo de la muerte”, símbolo de la insurrección antiestadounidense y de la violencia entre chiítas y sunnitas en 2006. La ceremonia de cesión tuvo lugar en Hila, la capital provincial, en presencia del consejero iraquí de seguridad nacional, Mowafaq al Rubai, y del número dos de las fuerzas estadounidenses en Irak, el general Lloyd Austin.

“Hoy día, las fuerzas de seguridad de Babilonia son capaces de asumir la seguridad y estamos orgullosos de tomar el relevo de las fuerzas estadounidenses”, declaró Mowafaq al Rubai. La policía y unidades del ejército iraquí, así como bomberos y policías antidisturbios desfilaron ante los responsable de Bagdad, los oficiales estadounidenses y los jefes de tribus locales.

Babilonia es la duodécima de las 18 provincias de Irak que pasa bajo el control de los iraquíes. En 2004, Babilonia sufrió atentados diarios perpetrados por grupos insurgentes contra las fuerzas de la coalición internacional. Nació así el “triángulo de la muerte”, que convirtió a esta provincia, muy cercana a la capital, en uno de los lugares más peligrosos de Irak.