EL MUNDO
Holocausto, vergüenza indeleble
El papa Benedicto XVI, refiriéndose ayer al Holocausto, lo calificó de “vergüenza indeleble en la historia de la humanidad” delante de más de 20 mil peregrinos congregados en la Plaza San Pedro para su audiencia general semanal. El Sumo Pontífice se refirió a “los campos de exterminio” y a “la infame operación de muerte” dirigida contra el pueblo judío por el régimen nazi que estaba en el poder en esa época en Alemania, su país natal.
Ratzinger, que consagra sus audiencias generales a la enseñanza religiosa, estaba comentando el Salmo 136 que se refiere a la tragedia que sufrió el pueblo judío durante la destrucción de Jerusalén en el año 586 antes de Cristo y su exilio en Babilonia. Ese salmo “es casi una anticipación simbólica de los campos de exterminio, donde durante el siglo que acaba de terminar el pueblo judío fue enviado para una infame operación de muerte, que permanece como una vergüenza indeleble en la historia de la humanidad”, declaró el pontífice. Durante las jornadas mundiales de la juventud en Colonia, al sur de Alemania, el Papa alemán visitó la sinagoga de esa ciudad para denunciar “el crimen sin precedentes” del Holocausto.