Centenares de nativos amazónicos de la comunidad ashuar tomaron a mediodía del martes parte de uno de los dos lotes petroleros que la empresa argentina Pluspetrol explota en la selva peruana, en una alejada región cercana a la frontera con Ecuador. La empresa admitió que se vio obligada a suspender la producción del 50 por ciento de la explotación petrolera del Lote 1AB que produce 30 mil barriles diarios. (El otro lote que explota la empresa argentina, el 8, produce 18 mil barriles por día.) El conflicto se agravó a lo largo del día y al cierre de esta edición los ashuar se movilizaban para intentar tomar hoy la totalidad de las instalaciones de Pluspetrol. De lograrlo, se paralizaría la producción del 58 por ciento de los 85 mil barriles diarios de petróleo que produce el Perú. “Esto tendría un impacto en la recaudación fiscal y en la comunidad de la zona que dejaría de recibir el canon petrolero, pero no afectaría el precio de los combustibles en el país porque el Perú compra el petróleo que produce al precio internacional”, señaló a Página/12 el economista Humberto Campodónico, catedrático de la Universidad de San Marcos.

Los ashuar, unos siete mil nativos, exigen que la empresa detenga la contaminación que ha afectado seriamente el río Corrientes, que ellos usan como única fuente de agua y que es de donde extraen los peces que son su principal alimento. Los nativos exigen que Pluspetrol ponga en marcha un programa para reinyectar la totalidad de las aguas contaminadas que ahora arroja al río como máximo en 2007, pero la empresa ofrece hacerlo en 2009. Otras demandas de los nativos son que se aplique el plan integral de salud para su comunidad ya aprobado por el gobierno y que implica una inversión de unos 12 millones de dólares en diez años, y que se suspenda cualquier nueva concesión petrolera en su territorio. “Si no hay solución, nos levantaremos”, declaró en noviembre a este diario Andrés Sandi, presidente de la Federación de Comunidades Nativas del Río Corrientes (Feconaco). No hubo solución en estas semanas y el martes los ashuar decidieron declararse en pie de guerra contra Pluspetrol. Este problema de contaminación viene de los años setenta, cuando estos lotes eran explotados por la Occidental y Petroperú. Pluspetrol los compró en los años noventa y luego se asoció con la China Nacional Petroleum Company, que tiene el 45 por ciento de la propiedad de estos lotes.

La lejanía y el aislamiento de la zona de conflicto dificultaba la información. Página/12 dialogó telefónicamente con Geanina Lucana, asesora de la comunidad ashuar. “La empresa trasladó por vía aérea unos 70 policías pero no pudo evitar la toma de sus instalaciones realizada por unos 700 hermanos ashuar”, aseguró Lucana.

Ayer viajó a la zona del conflicto una Comisión Multisectorial, integrada por representantes de la empresa, del gobierno central y del gobierno regional, pero los ashuar decidieron radicalizar su lucha.

Pluspetrol delegó la tarea de información a una compañía consultora en imagen. “Nosotros hemos emitido dos comunicados y en ellos está dicho todo. No hay ningún funcionario de Pluspetrol que pueda declarar”, dijo a Página/12 Carolina Morales, funcionaria de la empresa de imagen contratada por Pluspetrol. Los comunicados condenan la acción de los nativos y aseguran que la empresa está dispuesta a dialogar, pero no abordan los problemas de fondo que han originado el conflicto.