EL PAíS › LAS TRES MUERTES QUE DESPERTARON LA SOSPECHA

Crímenes en el sur

Son tres mujeres que murieron en otros tantos asaltos, en la zona sur del conurbano. En un cuarto caso, una mujer en Villa Bosch fue baleada en la cabeza y sobrevivió.

Un chico detenido por la bioquímica

El de Ana María Castro, de 54 años, fue el último de los tres casos y acaba de tener novedades: un adolescente de 15 años fue detenido como sospechoso del crimen de la bioquímica, cometido hace 10 días en Lanús. La mujer fue asesinada de un tiro cuando estaba dentro de su auto en la puerta de la casa de unos familiares en esa localidad. Su asesinato provocó una nueva movilización de vecinos, esa vez hacia la Jefatura Departamental local. El pedido también se repitió: más policía en la zona. Castro salió de la casa de un familiar para buscar los periódicos que había olvidado en su auto, cuando dos ladrones que se movilizaban en motocicleta intentaron robarle. La mujer se habría resistido el asalto, accionando la alarma del auto e intentado escapar, por lo que uno de los asaltantes le disparó apoyando su arma sobre la nuca de la mujer, según reveló el informe forense. La policía había comenzado a investigar a partir de los identikits dados por los testigos del robo y las huellas digitales encontradas en el auto de la mujer y en una moto abandonada cerca del lugar del asalto. El chico de 15 años acusado en ese caso fue apresado en la noche del miércoles en una villa de emergencia de Monte Chingolo. Es el mismo que una semana antes, el 29 de noviembre pasado, había sido detenido en Lanús tras un asalto y tiroteo con la policía, durante el cual murió un cómplice, según la información suministrada por la policía. Según esa fuente, fue liberado horas después por tratarse de un menor de edad. Los voceros policiales agregaron que al mismo adolescente se le atribuye otro hecho de robo calificado en el partido de Lanús, cometido el 8 de junio pasado, cuando otra familia fue asaltada. Ahora, el adolescente fue apresado con un revólver calibre 22 en su poder, que se presume pudo haber empleado en el crimen de la bioquímica oriunda de Necochea. Los investigadores buscan a un cómplice que también habría participado en crimen de Castro.

Renata Toscano (43)

Renata Toscano, de 43 años, fue asesinada el mediodía del 17 de noviembre, cuando llegaba a su casa, en la localidad bonaerense de Wilde, y tres ladrones intentaron robarle el auto. Uno de ellos disparó contra la mujer que se desempeñaba como arquitecta y catequista. El mismo día del hecho, la policía demoró a cuatro jóvenes, luego liberados por falta de pruebas. Tras el sepelio, los vecinos del barrio realizaron la primera de cuatro marchas hacia la comisaría local para pedir un aumento de las medidas de seguridad. Los vecinos consiguieron hablar con el comisario y hasta con el titular de la Superintendencia Sur de la Bonaerense, Mario Valente. En los días siguientes se aumentó la custodia policial y la Gendarmería tuvo la orden del gobernador, Daniel Scioli, para patrullar las villas cercanas. A cinco días del asesinato fue capturado en Avellaneda un joven de 22 años imputado como “actor material del hecho”. A una semana, otras dos personas fueron detenidas acusadas de encubrir el asesinato. Días más tarde, se detuvo a un chico de 17 años, que estaría vinculado directamente con el crimen.

Sandra Almirón (37)

A ocho días del asesinato de Renata Toscano, Sandra Almirón, de 37 años, fue asesinada en circunstancias similares en la localidad bonaerense de Derqui: tres ladrones, dos de ellos menores de edad, le robaron el auto en la puerta de su casa y la mataron. El asesinato provocó nuevas movilizaciones de vecinos y, a un día del asesinato, la policía detuvo a dos jóvenes de 17 y 19 años como responsables del hecho. Al día siguiente, el chico de 19 años confesó haber participado del hecho y aseguró que el disparo que mató a la maestra provino del arma de uno de los chicos menores de edad. El tercer integrante del grupo es un chico de 16 años, hijo de un policía que facilitó los datos a sus colegas para que lo capturaran. En su declaración, el mayor del grupo explicó que la intención era robar dentro de la casa y que la mujer se resistió al asalto. Los tres asaltantes vivían en el barrio de la docente y una de las versiones del caso apuntaba a que uno de ellos fue alumno de ella y había buscado matarla por miedo a que los delatara. La causa quedó a cargo del Fuero Penal Juvenil local.

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