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Néstor Kirchner abrió la reunión del Consejo Nacional del PJ velando por la salud de Alberto Balestrini. El presidente del PJ bonaerense y vicejefe de gobierno provincial estaba siendo sometido a una operación quirúrgica en ese momento. Faltaban pocos minutos para las 21. Pese a que en algún momento sobrevoló la posibilidad de suspender el encuentro, se decidió seguir adelante: “Con todo el consejo reunido, decidimos que había que seguir trabajando”, explicaron en el gobierno bonaerense.

La sede del encuentro fue en La Plata, en la residencia del gobernador Daniel Scioli. Al encuentro asistió la cúpula del partido, encabezada por los vicepresidentes Scioli –segundo en la cadena de mando–; Jorge Capitanich, Beatriz Rojkes de Alperovich y Hugo Moyano. Estuvieron los gobernadores del PJ alineados al kirchnerismo y presidentes de los bloques de diputados y senadores de las provincias. Hubo “asistencia perfecta”, se dijo, tanto que alguien en la mesa se paró a subrayarlo.

Scioli dio por comenzado el encuentro y después tomó la palabra Kirchner, que empezó mencionando a Balestrini. A partir de ese momento, el ex presidente se dedicó al motivo que había convocado al encuentro: los fondos de coparticipación para las provincias. Tras un repaso detallado de la situación económica mundial, en el que repasó la situación de China, la India y Brasil para encuadrar a la Argentina en ese contexto, detalló los bemoles de la economía local.

Uno de los gobernadores del norte andino que estaba entre los presentes subrayó también el entramado político: “Y obviamente después Kirchner hizo una exhortación a que el PJ en todos los distritos no se duerma y que es absolutamente necesario no rehuir el debate con la oposición”.

La reunión tomó entonces tónica de trabajo. Algunos dirigentes K propusieron fechas de próximos encuentros. Uno de ellos se hará el 27 de abril, aniversario del primer triunfo de Kirchner. Como la fecha además coincide con la primera huelga contra la dictadura, en el año 1979, le pidieron la anuencia a Hugo Moyano, por si la fecha coincidía con una movilización.

Para varios gobernadores recién en ese momento empezará el verdadero trabajo de discusión de los fondos. Los más ansiosos están convencidos de que el Consejo del PJ deberá desdoblar las horas de trabajo, convocar a la mañana a los vicepresidentes y a la tarde a los gobernadores y presidentes de bloques legislativos en la comisión especial de coparticipación, para discutir sobre los fondos. “Es que, si no, va a ser contraproducente”, dijo un gobernador a este diario. “Si vuelve a juntarse todo el mundo como ahora, es perder tiempo porque no se va a llegar a ningún acuerdo con todos: achicando la comisión se contribuye a que haya un mínimo avance”.

Entre los presentes estuvieron el díscolo Juan Manuel Urtubey (Salta), y también los gobernadores más alineados, José Luis Gioja (San Juan), José Alperovich (Tucumán), Walter Barrionuevo (Jujuy), que llegó a Buenos Aires un día antes y mantuvo unos minutos de reunión con Cristina Kirchner, entre otros mandatarios provinciales.

Para el kirchnerismo, el encuentro era clave por varias razones. Desde el corazón del Gobierno saben que salieron derrotados de las elecciones y trabajan para revertirlo. Evalúan que deben recuperar imagen positiva para llegar a las primarias abiertas con chances y sobrevivir en un eventual ballottage. Una pata de esa reconstrucción se apoya en la transversalidad con los movimientos fuera del PJ; la otra es la estructura partidaria a donde Kirchner volvió –dicen– para reavivar el espacio, institucionalizarlo y evitar “regalárselo” al PJ disidente.