La cámara que agrupa a los diferentes actores de la industria nacional de tecnología (Camoca) emitió un comunicado para expresar su apoyo al proyecto del Gobierno de repartir tres millones de computadoras portátiles entre los alumnos secundarios de colegios estatales. “Celebramos la iniciativa no sólo por sus implicancias en términos de inclusión social, igualdad de oportunidades y reducción de la brecha digital, sino también por las oportunidades que representa para la industria tecnológica nacional, que podría contribuir en la fabricación y ensamblado de estos equipos, generando nuevas inversiones y trabajo para los argentinos en todo el país”, afirmó.

Antes del anuncio oficial que hizo anteayer la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, funcionarios del Ministerio de Industria tomaron contacto con empresarios de este sector para comunicarles que serán tenidos en cuenta en las licitaciones que se preparan para la compra de las netbooks. Tanto el titular de la Anses, Diego Bo-ssio, como el ministro de Educación, Alberto Sileoni, expresaron públicamente que el Gobierno pretende que la industria nacional se involucre activamente en el proyecto. “Como disponemos del dinero, si quisiéramos podríamos traer en poco tiempo todas las máquinas desde China. Pero no es la idea, este proyecto también tiene que resultar un incentivo para el desarrollo de un sector estratégico como el tecnológico”, indicó a Página/12 un funcionario vinculado con el plan.

Los armadores de computadoras están despachando actualmente al mercado entre 20 mil y 25 mil netbooks por mes, que cubren alrededor del 25 por ciento de la demanda. Esos empresarios ya le dijeron al Gobierno que podrían elevar su capacidad de producción hasta 150 mil equipos al mes en poco tiempo, pero necesitan apoyo crediticio y plazos de pago cortos para no sufrir ahogos financieros. Otro tema a evaluar es cómo se sostiene el empleo luego de que se cubra el stock de computadoras. Si bien es cierto que todos los años habrá que entregar nuevos equipos para los chicos que ingresan al secundario, ese flujo no sería suficiente para sostener un plantel mayor. Una alternativa es que las empresas se integren para ofrecer el servicio de mantenimiento y actualización de las computadoras. Son cuestiones que se deberán resolver en los próximos tres meses, el plazo previsto para el comienzo de las licitaciones.