Desde Villa Gesell

En un pequeño parate proselitista, el diputado Ricardo Alfonsín estaba hace unos días en su Chascomús natal, lo llamó al gobernador de Santa Fe, Hermes Binner y le preguntó si podían juntarse a charlar. De vacaciones, el mandatario socialista le dijo que se pasara por su casa en Villa Gesell, donde se aloja todos los años. Después de un encuentro privado, en el que hablaron sobre la situación política del radicalismo y del socialismo, compartieron una conferencia de prensa en el bar Torino de esta ciudad balnearia, en la que ratificaron con una foto la intención de compartir la fórmula presidencial en 2011. Este fue el primer encuentro entre ambos luego de que el senador Ernesto Sanz confirmara su intención de sumarse a la pelea por la candidatura presidencial de la UCR y se consensuara la idea de hacer una interna de afiliados, prevista para abril o mayo. “Yo creo que ganamos con holgura la interna, nadie en el partido tiene ninguna duda respecto de eso”, sostuvo ayer Alfonsín, previo a la cumbre.

Después de un convulsionado comienzo de año para la UCR y el Frente Progresista, la situación terminó por estabilizarse a mediados de enero. El próximo 24 de este mes la mesa ejecutiva del Comité Nacional convocará a una interna de afiliados para elegir entre Alfonsín y Sanz el candidato a presidente. Julio Cobos acordó que participará sólo de las primarias de agosto pero no impugnará la elección. Para continuar su proceso de instalación, Sanz arrancará mañana una recorrida por la costa atlántica, después de un intenso raid mediático y político por Córdoba, Mendoza y la ciudad de Buenos Aires.

Alfonsín, en cambio, volvió de unas vacaciones en Miami, donde viajó a visitar a su hermana que vive allá, y retomó inmediatamente su intensa agenda de actividades. De lunes a jueves, el conurbano bonaerense y de viernes a domingo, la costa y el interior del país. En ese contexto, y con la interna radical medianamente encaminada, Alfonsín se reunió ayer con Binner.

En una charla “de amigos”, como definieron allegados al radical, ambos dirigentes evaluaron la situación política actual, confiaron que según las encuestas que manejan, hoy habría nuevamente un escenario de ballottage entre la presidenta Cristina Fernández y el Frente Progresista, con un resultado incierto en la segunda vuelta. “Tenemos que evitar que las internas del radicalismo y el socialismo perjudiquen las chances del Frente Progresista”, resumió un dirigente que participó del encuentro.

Según trascendió, la idea de ambos dirigentes es acelerar la discusión programática para unificar los criterios de sus equipos técnicos y una vez confeccionado el plan de gobierno, salir a instalarlo y convocar a otras fuerzas políticas como la Coalición Cívica y Proyecto Sur.

Con el mismo objetivo, Alfonsín se reunió ayer por la noche con Margarita Stolbizer, del GEN. Ambos compartieron un acto en Carlos Casares, provincia de Buenos Aires, y aprovecharon para charlar sobre las consecuencias de los procesos internos que se viven en Frente Progresista.

Más temprano, en declaraciones radiales, Alfonsín sostuvo que le van a ganar “con holgura” a Sanz en la interna y que la alianza con el socialismo “es posible para el 2011 y para siempre”. “Es más difícil explicar por qué compiten el partido radical y el socialismo en una elección que explicar por qué están unidos”, dijo Alfonsín, en lo que se convirtió en una muletilla para hablar de su buena relación con los socialistas.

Lo cierto es que el vínculo con Binner, Ricardo lo heredó de su padre, Raúl, con quien el socialista compartió buena parte de sus ideas políticas. Entre otras cosas, por este motivo los socialistas prefieren a Alfonsín por sobre los otros dos candidatos, Sanz y Cobos. Desde el comité de campaña del bonaerense salieron al cruce de Sanz, quien en los últimos días sostuvo que el encuentro entre el cobismo y el alfonsinismo fue generado por el avance de su candidatura. “Es una falta de respeto que Sanz, siendo un ignoto desconocido, diga eso porque Cobos está mucho más arriba que él”, arremetieron en el entorno alfonsinista.