En la Casa Rosada no hubo declaraciones a propósito de los sucesos ocurridos el jueves en Santa Cruz. A las 13, luego de mantener reuniones en Olivos, la presidenta Cristina Kirchner partió al Sur, volando en el Tango 01 directamente a El Calafate, evitando escalas en Río Gallegos, centro del conflicto. La Presidenta pasará el fin de año con sus hijos Máximo y Florencia y tiene previsto regresar a Buenos Aires el lunes, ya para prepararse para la intervención quirúrgica a la que deberá someterse el miércoles.

“De ese tema no vamos a hablar”, respondió una fuente de Presidencia consultada ayer sobre la situación política que atraviesa Santa Cruz. En medio del hermetismo, lo único que llegaban a admitir era la situación “complicada” en la que había quedado el gobernador Daniel Peralta luego de la represión policial y la falta de apoyos de algunos funcionarios y legisladores. Aclaraban que en la agenda de CFK no había pautada ninguna reunión con Peralta, tal como se había esperanzado el gobernador. Incluso, una versión indicaba que ayer Peralta había intentado comunicarse telefónicamente con la Presidenta pero que solo había conseguido conversar con el secretario de Legal y Técnica, Carlos Zannini, también santacruceño.

En rigor, el viaje de Cristina Kirchner al Sur estaba previsto originalmente para el jueves pero lo postergó un día debido a los incidentes. La suspensión le sirvió para ajustar detalles con el vicepresidente Amado Boudou de cómo trabajarán durante enero, cuando él quede a cargo del Ejecutivo. Es que ya no está prevista ninguna otra actividad oficial de la Presidenta hasta su operación.

El fin de semana estará en su casa de El Calafate con sus hijos, su madre Ofelia Wilhelm, su cuñada y ministra Alicia Kirchner, y algunos otros familiares. El lunes 2 regresará a Buenos Aires para prepararse para la operación, aunque oficialmente su licencia arrancará el mismo miércoles 4 en el que será sometida a una intervención en la que se le extirpará un carcinoma de la glándula tiroides en el Hospital Universitario Austral, en Pilar. La licencia será por veinte días –hasta el 24 de enero– aunque, de esos, sólo estará internada 72 horas, por lo que se supone que el resto de la recuperación la pasará en Olivos, aunque no se brindó información detallada al respecto.