La presidenta de Abuelas, Estela Carlotto, junto a Taty Almeida, de Madres LF, y Lita Boitano, de Familiares.
Imagen: Télam.

Los juicios por delitos de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura “no son una respuesta aislada a las gravísimas violaciones a los derechos humanos, sino que son el resultado de años de lucha de las víctimas, sus familiares y los organismos de derechos humanos, y se han constituido como política de Estado. Estos procesos son un ejemplo a nivel regional y global”. De esta forma, las Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, las Abuelas de Plaza de Mayo, el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), Familiares de Desaparecidos y Detenidos por Razones Políticas e Hijos respondieron institucionalmente a las palabras del gobernador cordobés, José Manuel de la Sota, quien había calificado los juicios contra los represores como una política del “resentimiento” y había afirmado que la Argentina necesitaba “un baño de reconciliación”. “Nunca vamos a negociar la sangre de los padres de nuestros nietos”, señaló la presidenta de Abuelas, Estela Carlotto. Los ministros de Justicia, Julio Alak, y de Seguridad, Nilda Garré, también criticaron a De la Sota. (ver aparte)

“El gobierno nacional desarrolla una política del resentimiento, en vez de negociar para conseguir la información necesaria se dedicó a amenazar (a los represores) diciéndoles ‘los vamos a reventar’.” Y propuso que se haga como en “otros países”, en los que se canjeó una reducción de penas a cambio de información. El miércoles le contestaron distintos representantes de organismos de derechos humanos y el secretario del área, Martín Fresneda, quien señaló que no se podía hablar de resentimiento porque en más de treinta años “no hubo actitudes de venganza” y que la reducción de penas debía ser analizada por los jueces en los casos particulares y que el Poder Ejecutivo no podía “sentarse a negociar”.

Ayer, Abuelas de Plaza de Mayo, Madres de Plaza de Mayo-Línea Fundadora, Familiares de Desaparecidos y Detenidos por razones políticas y la agrupación Hijos dieron una conferencia de prensa en la que repudiaron las declaraciones de De la Sota “en nuestro nombre y en el de los 30.000 desaparecidos”.

“La reapertura de los procesos judiciales clausuró una larga etapa de impunidad y constituyó el principal avance en materia de justicia en la última década. Los juicios son un ejemplo a nivel regional y global de cómo el Estado puede asumir la persecución penal de estos crímenes con tribunales nacionales conforme lo dispone la ley, enmarcados en el derecho a la defensa y el debido proceso legal y reforzando los derechos humanos y el fortalecimiento de las instituciones democráticas”, leyó la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela Carlotto. La mujer agregó luego que “nosotras andamos con bastones porque no nos arrodillamos” y criticó a de la Sota por propiciar el regreso de la teoría de los dos demonios.

Los organismos también recordaron que el juzgamiento de los represores cumple con una obligación internacional del Estado y que, en mayo de 2010, la Cámara de Diputados declaró, por unanimidad, que estos procesos formaban parte de una “política de Estado”.

Durante la conferencia de prensa que se realizó ayer, Lita Boitano, de Familiares, aseguró que “el pensamiento que expresa De la Sota no es nuevo” y que “aprovechó la muerte de (Jorge Rafael) Videla para hacer una nueva declaración”. Taty Almeida, de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, calificó como “abominable lo que dijo De la Sota” y sostuvo que “nos retrotrae a cuando el presidente que vino después de Alfonsín, (en referencia a Carlos Menem) quiso demoler la ESMA y hacer un gran parque de reconciliación”. En representación de Hijos, Paula Maroni destacó que los juicios “no son sólo una herramienta para los familiares de los 30.000 desaparecidos sino que sientan las bases del país que queremos vivir”, y agregó que “nos dan lástima y tristeza los políticos como De la Sota, que se comportan como empleados de los poderes económicos”.

Julio Morresi, de Familiares, manifestó que “parece que algunos, como De la Sota, están haciendo méritos para ser los candidatos de la derecha y tienen miedo de que este país siga adelante”, y reiteró “nosotros siempre pedimos ‘verdad, justicia y memoria’ y nunca venganza”. Almeida agregó: “Tienen miedo de que sigamos investigando y caigan los civiles y responsables de grupos económicos que faltan, pero no hay marcha atrás, no vamos a estar vivas cuando caiga el último genocida preso, pero luchamos cada día para eso”. Carlotto fue consultada por la negativa de De la Sota a referirse a los casos de torturas en las cárceles de Córdoba, ante lo que expresó que “nosotros firmamos el repudio a esas prácticas y le volvemos a decir que se preocupe por las violaciones de derechos humanos que se están cometiendo hoy en su provincia”.

La Comisión Provincial por la Memoria de la provincia de Buenos Aires y el Instituto Espacio Memoria (IEM) también expresaron su rechazo al gobernador cordobés. “Es el camino de la justicia el que hace la verdad y ésta no es posible sobre la base de la impunidad. Verdad y justicia no pueden ser objeto de transacción, sin dejar de ser lo que son. Países que han tenido comisiones de verdad y reconciliación han quedado, en general, con una carga de sentimiento de impunidad”, dijo Laura Conte, vicepresidenta de la Comisión y Madre de Plaza de Mayo. Desde el IME señalaron con un comunicado que de la Sota “desprecia la lucha histórica del movimiento de derechos humanos y desconoce los logros alcanzados hasta hoy”. “Ni olvido, ni perdón ni reconciliación”, finaliza el organismo.