Mauricio Macri y Gabriela Michetti arrancaron temprano el día de campaña. A las diez menos cuarto de la mañana desayunaron en la tradicional confitería Las Violetas, donde se reunieron con un grupo de padres adoptivos a quienes presentaron un proyecto de registro único de aspirantes a guarda para la adopción. Durante el encuentro, los padres pidieron que la ciudad de Buenos Aires acelerara los trámites para la adopción.

“Adoptar un chico representa una responsabilidad enorme, en la cual el Estado debe estar presente con políticas sociales para proteger esencialmente al niño y brindar contención a las madres que decidieron dar su hijo en adopción”, declaró el candidato del PRO.

Luego, en una ronda de prensa con los medios, sostuvo que de ser electo le reclamará a Jorge Telerman un traspaso sin sorpresas. “Vamos a sentarnos con el actual jefe de Gobierno a coordinar una transición ordenada, para que nos asegure que no va a haber despilfarro, que se va a cuidar el presupuesto y que no se van a hacer nombramientos políticos, queriendo meter gente adentro, como hacen siempre los que se van”, sostuvo.

Macri apuntó a mostrarse como el ganador indiscutido en el ballottage del próximo domingo. Afirmó que no piensa en asumir anticipadamente el poder y estimó que “no corresponde” pedir la realización de una auditoría en los días posteriores al ballottage, ya que la fecha del traspaso del gobierno será recién el 10 de diciembre.

También desmintió que se proponga continuar la autopista iniciada por el brigadier Osvaldo Cacciatore, intendente porteño durante la dictadura militar, de cuya obra Macri expresó su admiración. “Es parte de la campaña sucia que lidera Daniel Filmus”, aseguró a modo de desmentida.