Ocho imputados serán sometidos a juicio oral y público desde mañana por el contrabando a España de 60 kilos de cocaína en valijas que fueron despachadas en un vuelo de la empresa Southern Winds (SW). Por el caso, hace dos años fueron relevados el jefe de la Fuerza Aérea, Carlos Rohde, y el jefe de seguridad del Aeropuerto de Ezeiza, Alberto Beltrame. Y se disolvió la Policía Aeronáutica Nacional (PAN), reemplazada por la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA).

El Tribunal Oral en lo Penal Económico 3 deberá escuchar a cerca de 200 testigos en dos meses. Los principales imputados son cuatro ex empleados de SW: Walter Beltrame, ex encargado de atención a pasajeros frecuentes; Claudio Baudino, ex supervisor de tráfico de SW; Fernando Arriete, ex gerente de ventas, y Ariel Tamburrini, ex jefe de base de la aerolínea en Madrid. También tendrán lugar entre los acusados Elena Toimil Batán y José Ramón González Villar, una pareja española que recibiría la droga; Guillermo Sardi, supuesto vínculo con el matrimonio; y el colombiano Juan David Aristizábal Tabares, un remisero.

El caso se inició el 17 de septiembre de 2004, cuando cuatro valijas con membrete de la Embajada de Argentina en España llegaron desde Buenos Aires al aeropuerto de Barajas, Madrid, en el vuelo 6420 de la empresa SW. Como nadie las retiró, fueron revisaron y se descubrieron 58,900 kilos de cocaína. El escándalo estalló en febrero de 2005, cuando se supo que uno de los prófugos, luego detenido, era hijo del comodoro Beltrame.