La familia de Jorge Julio López insistió en que “a esta altura”, tras 20 días de búsqueda, “se puede pensar cualquier cosa”. La policía lo buscó en el oeste de la provincia por aviso de gente que creyó haberlo visto. Hubo rastrillajes en General Pinto porque vecinos y comerciantes dieron el aviso, pero los efectivos no hallaron ningún rastro. Aunque los organismos de derechos humanos sospechan que el testigo clave contra el represor Miguel Etchecolatz fue secuestrado, el Gobierno llamó a no perder las esperanzas de que “esté con vida”. “Estoy convencido de que va a aparecer”, dijo el ministro del Interior, Aníbal Fernández. El gobernador Felipe Solá señaló que “hay que rastrillar todas las pistas”.