El director médico del Servicio Penitenciario Federal (SPF) Julio Marino, de 57 años, murió ayer a la madrugada en el hospital Churruca, tras haber sido baleado por delincuentes que en la tarde de ayer supuestamente intentaron asaltarlo cuando viajaba en su camioneta por el barrio porteño de Boedo. La víctima, según los investigadores, habría retirado una suma importante de dinero momentos antes del presunto asalto, aunque hay quienes sospechan de que se trató de una vendetta.