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"Hemos decidido activar el plan de apoyo a Grecia", informó el primer ministro luxemburgués, Jean-Claude Juncker, jefe de los ministros de Finanzas, al término de una reunión en Bruselas para evaluar el plan de austeridad presentado el domingo por el gobierno heleno.

Los países que comparten el euro aportarán, en forma de préstamos bilaterales, 80.000 millones de euros, de los cuales 30.000 millones de euros serán entregados durante 2010, mientras que el resto correrá a cuenta del Fondo Monetario Internacional (FMI).

Juncker anunció paralelamente que los jefes de Estado y de gobierno de la Eurozona se reunirán el próximo viernes en Bruselas para confirmar la activación del plan y preparar las primeras transferencias de dinero.

La ayuda financiera fue aprobada después de que los ministros se mostraran satisfechos con el plan de Grecia para sanear sus finanzas públicas y reducir su déficit público del casi 14 por ciento del PIB actual al 3 por ciento para fines de 2014.

Según las actuales informaciones, el Impuesto al Valor Añadido (IVA) subirá en Grecia del 21 por ciento actual al 23 por ciento. Además, se suprimirán los décimo tercer y décimo cuarto salarios para los funcionarios públicos. A cambio, se pagará un aguinaldo por Navidad de 500 euros, más 250 euros por Semana Santa y vacaciones.

Los dos principales sindicatos griegos anunciaron nuevas huelgas en protesta por el programa. "Perdemos casi el 30 por ciento de nuestros ingresos; eso es intolerable", dijo en la radio el presidente del sindicato de empleados públicos (ADEDY), Spyros Papaspyros