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De crearse dicha comisión investigadora podría avanzar en dirección a un posible juicio político, ya sea a Macri o bien a alguno de sus funcionarios involucrados en el caso de las escuchas ilegales.

La instancia de la Comisión, contemplada en la Constitución porteña, comenzó a ser admitida por los legisladores luego de una semana en la cual Macri debió prestar declaración indagatoria ante el juez Norberto Oyarbide por es espionaje y quedó al borde un procesamiento.

Además, se sumó el enojo de los bloques antimacristas generado por el intento frustrado del oficialismo de llevar al recinto al ministro Guillermo Montenegro, para que de "manera espontánea" responda ante los diputados sobre el caso y, de esa manera, desactivar la interpelación al funcionario que estaba en curso dentro de la Legislatura.

"Hay que investigar políticamente esta situación", sostuvo Diego Kravetz, titular de la bancada Peronista en la Legislatura porteña, quien consideró que la Comisión se constituiría en "una herramienta constitucional para analizar con mayor grado de detalle la causa y, a partir de ahí, emitir un informe con los resultados de dicha investigación".

Por su parte, el presidente del bloque UCR, Claudio Presman, señaló que "el tema prioritario es el respeto a las instituciones, aguardar el correcto desenvolvimiento de la tarea judicial y la creación de una Comisión Investigadora en el ámbito de la Legislatura que podría realizar aportes significativos a la causa".

En tanto, Fernando Sánchez, presidente del bloque de la Coalición Cívica en la Legislatura porteña, señaló que su banca "dio garantías a Macri y a Montenegro para que ejerzan su derecho a defensa".

La creación de una Comisión está incluida en la Carta Magna de la Ciudad y establece que la Legislatura puede impulsar esa instancia "sobre cualquier cuestión de interés público" y fija su integración con diputados "respetando la representación de los partidos políticos y alianzas".

Para su conformación, es requisito previo e ineludible la presentación de un proyecto en tal sentido y su posterior aprobación, que necesita de una mayoría simple, esto es, 31 manos alzadas a las que, según los cálculos, llegaría la oposición que cuenta con 34 votos. El PRO suma 26 bancas.

Sin embargo, el bloque macrista, a cargo de Cristian Ritondo, se esforzará por buscar alianzas con alguno de las bancas opositoras que le concedan los cinco votos que le faltan para evitar la creación de la Comisión.